• «La vida es como una cebolla. Le quitas una capa a la vez y, a veces, lloras». —Carl Sandburg.
• «Cuando estoy perdido, solo miro en tus ojos. Tú me muestras el significado de la vida». —Cantante Kelly Clarkson.
• «El único sentido de la vida es servir a la humanidad». —Escritor ruso León Tolstoi.
• «La vida es tener hambre continuamente». —Actor y político Arnold Schwarzenegger.
Sin embargo, no podemos encontrar el sentido de la vida en internet. No intentaré decirte el significado de la vida (aunque tengo una opinión), pero voy a asumir que —de alguna manera— ya respondiste a esa pregunta. Y quizá no solo a esa. ¿Ya tienes respuestas a las cinco grandes preguntas de la vida?: ¿De dónde vengo? ¿Quién soy? ¿Por qué estoy aquí? ¿Cómo debo vivir? ¿Adónde voy?
Pregúntate: «¿Cuál es mi respuesta a esas preguntas?». Mira tu vida; asómate a tu mente y a tu corazón. Si reconoces la posibilidad de no ser objetivo, pide la opinión a algunos familiares y amigos cercanos. Escucha las respuestas que tengan para estas preguntas:
1. Sobre el origen.- ¿De dónde vengo? Nos fascinan las historias del origen de las personas. ¿De dónde vienen? Sin embargo, debemos retroceder aún más. ¿Se remonta la historia de la vida a un «big bang» sin causa? Si la respuesta es «sí», mi lealtad debe ser principalmente para mí mismo, mi supervivencia y avance. Sin embargo, si mi respuesta es que venimos de un Creador, vale la pena también preguntarnos:
2. Sobre la identidad- ¿Quién soy? Está bien documentado que las personas menores de 30 años luchan con preguntas sobre su identidad, pero es una cuestión con la que todos nos enfrentamos. ¿Qué crees que nos diferencia a cada uno de nosotros? Esto se relaciona con la siguiente pregunta, una de significado.
3. ¿Cuál es nuestro propósito? - ¿Por qué estoy aquí? Cada vez más, exigimos tener un propósito en el trabajo, pero a menudo no hacemos la pregunta sobre la vida como un todo. Quizás estamos demasiado distraídos con los teléfonos inteligentes, los dispositivos de alta tecnología y las responsabilidades para buscar una respuesta. Incluso si dices que no sabes la respuesta, tu vida misma muestra cuál crees que es el propósito de la vida. ¿Es la felicidad tu barómetro? O tal vez tu vida diga algo más: compartir alegría y bondad con los demás; dejar un legado; ganar y probarse a sí mismo; glorificar a Dios; o dejar el mundo mejor de como lo encontraste.
4. ¿Qué hay de la moralidad? - ¿Cómo debemos vivir? Cuando se le preguntó sobre el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, a un destacado CEO de la generación del milenio explicó que es: «Tener todo lo que desea en la oficina y todo lo que desea fuera de la oficina». ¿Pero ese es el objetivo? ¿O hay reglas más objetivas para vivir? Cada religión tiene su código de ética, pero incluso los no religiosos viven con un sentido de moralidad. C.S. Lewis escribió que, religiosos o no, todos creemos en los conceptos del bien y del mal. ¿Qué está permitido? ¿Qué es lo mejor? Para ti, si es la moralidad delineada en la Biblia, Dios nos ha dado mandamientos difíciles: ama a tu prójimo como a ti mismo, perdona a quien te haya lastimado, piensa en los demás por encima de ti y muchos otros.
5. ¿Y qué del destino? - ¿Adónde vamos? Incluso en un mundo donde cada vez menos personas creen en Dios, la gente todavía cree en la otra vida. Incluso en una sociedad en la que el progreso ha provocado dolor y sufrimiento de tantas formas, la humanidad sigue buscando más progreso. Todos creemos que vamos a alguna parte, ya sea individualmente o como cultura y especie. Entonces, ¿cuál es nuestro destino? ¿Qué sucede después de que morimos? Lo que piensas sobre el destino para ti y para los demás debería impactar la forma en que vives hoy.
Responder a estas cinco preguntas puede asentar tu vida como los cimientos asientan un edificio. Cuando llegan las tormentas, estas pueden convertirse en los cimientos a los que te aferras y dices: «Pase lo que pase, esto es sobre lo que construyo mi vida».
Stephen R. Graves