"Cómo hablar para que los niños escuchen y escuchen para que los niños hablen" de Adele Faber y Elaine Mazlish es un libro clásico para padres que proporciona estrategias prácticas de comunicación para construir relaciones positivas con los niños.
Aquí hay 10 lecciones del libro:
1. Reconocer los sentimientos: Fomente la comunicación abierta reconociendo y validando los sentimientos de su hijo. Cuando los niños se sienten escuchados y comprendidos, se crea la base para una interacción positiva.
2. Evite la negación de los sentimientos: En lugar de descartar las emociones de un niño, el libro aconseja reconocer y aceptar sus sentimientos. Negar los sentimientos puede provocar frustración y fallas en la comunicación.
3. Proporcionar información en partes manejables: Divida la información en partes manejables para ayudar a los niños a comprenderla y procesarla mejor. Este enfoque puede hacer que las instrucciones o explicaciones sean más accesibles y efectivas.
4. Utilice alternativas al castigo: El libro aboga por el uso de alternativas al castigo, como reconocer los sentimientos, ofrecer opciones y resolver problemas juntos. Esto ayuda a los niños a aprender de sus experiencias sin sentirse punitivos.
5. Opciones de oferta: Ofrecer a los niños opciones les empodera y fomenta un sentido de autonomía. También ayuda a prevenir luchas de poder y fomenta la cooperación.
6. Describa, no etiquete: En lugar de etiquetar a un niño con términos negativos, describa su comportamiento o acciones. Este enfoque ayuda a evitar una reacción defensiva y fomenta el cambio positivo.
7. Utilice declaraciones en primera persona: Exprese sus propios sentimientos y necesidades utilizando declaraciones en primera persona. Esto ayuda a evitar culpar y fomenta una atmósfera de colaboración donde tanto los padres como el niño pueden compartir sus perspectivas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario