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01 abril 2025
Cuando el dinero crecía en los árboles: el Cacao y la Realeza
"Y entonces los dioses crearon cuatro árboles en los cuatro rumbos del mundo: el árbol del cacao, el árbol del maíz, el árbol del algodón y el árbol de la ceiba. Estos árboles eran sagrados y proporcionaban alimento y sustento a los hombres." Popol Vuh
En las antiguas civilizaciones mesoamericanas, el cacao no solo era un alimento; era un regalo divino. Según la leyenda, el dios Quetzalcóatl, conocido como el dios de la sabiduría y la vida, decidió compartir con los humanos un valioso presente: el árbol de cacao.
Quetzalcoatl robó el árbol sagrado del paraíso de los dioses y lo plantó en la tierra, enseñando a los hombres a cosecharlo y preparar una bebida sagrada que fortalecía el cuerpo y espíritu.

El cacao no era solo un alimento; representaba la fertilidad, la abundancia y la sabiduría. En este sentido, el cacao se convirtió en un símbolo de nobleza y privilegio, reservado para las clases altas y las ceremonias religiosas. En las cortes de las antiguas civilizaciones mayas y aztecas, el cacao era utilizado como moneda de cambio. ¡Literalmente, el dinero crecía en los árboles! Estos granos de cacao eran tan valiosos que se intercambiaban por bienes y servicios e incluso se utilizaba para pagar impuestos.
Con la llegada de los españoles, el cacao viajó a Europa, donde se transformó en lo que hoy conocemos como chocolate. Los conquistadores quedaron fascinados con la bebida amarga que los nobles aztecas consumían, y a su regreso a Europa, comenzaron a endulzarla, creando una nueva industria que conquistaría los palacios europeos.
20 marzo 2025
Cherry Bloosom
Las flores del ciruelo simbolizan buena fortuna, renovación, esperanza, vitalidad, resistencia, protección y comienzo de la primavera.
16 marzo 2025
Nuevamente llego a Japón
Me parece increíble que mis pies nuevamente llegan a la tierra del Sol Naciente... a Japón, pero considerando que tengo a Dios de mi lado, esto no es más que Gracia, totalmente inmerecido, aunque muy deseado.
Hace unos días en torno a todos los preparativos antes de viajar le comentaba a Valdemar, mi amado esposo, que siempre soñé con ver y estar en la temporada de Sakuras o Cherry Blosoms, o Floración de los Cerezos, pero que además siempre creí que tal vez no me iba a ser posible, por ser una temporada muy deseada por los viajeros, y no me equivoco en decir que no se parece en nada a viajar a Japón en otra temporada.
Se cumple también un deseo y promesa a mi sobrino Erwin, de acompañarlo a su Graduación de Maestría, ¿Quién iba a decir que un sobrino mío hoy domina el Japonés, ha completado su carrera profesional y además su Post Grado en este hermoso país?, y en verdad que nos llena de orgullo cada uno de sus logros, que no ha sido nada fácil para él dejar a su familia y su país, y moverse de su zona de confort, para avanzar como profesionista, pero Dios lo ha abrazado y lo ha sostenido, y le ha abierto puertas por este lado del mundo, y es una bendición disfrutar estos días con él.
¿Qué nos espera en esté viaje? Definitivamente estamos expectantes de saber
¿Qué tesoros encontraremos? Seguramente muchos, tomados de la mano de Dios y con su favor
¿Qué gran magia verán nuestros ojos? Pronto lo descubriremos por gracia y amor
Por lo pronto, como decía San Francisco de Asis... "que Dios me permita ser siempre un instrumento de paz"
Edith Reyna-Villarreal (Desde Japón)
15 marzo 2025
Gabatte: El arte japonés de avanzar siempre
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