Las fronteras

 Ayer mi prima Monica publicó unas fotografías del único puente colgante que hay entre USA y Mexico (puente internacional que dejó de funcionar en 1979, pero creo que sigue ahí sin usarse) y dio paso a un puente más grande y moderno, y una de esas imagenes captó mi atención, mis recuerdos y la nostalgia.  Yo era realmente una niña de unos 5 años y recuerdo haber cruzado ese puente caminando con mis papás y/o en la camioneta de mi abuelo Beto.  

Era un pueblito fronterizo, hoy una pequeña ciudad, recuerdo que de la casa de los abuelos a la tienda en USA era una distancia accesible para caminar sin problema, ibamos a la "Grocery Store" a comprar viveres y nuestra nieve y cheetos... los abuelos nos consentían teniendo eso en el refrigerador cuando llegabamos a visitarlos siempre... Recuerdo la nieve en caja sabor napolitano... ¡como me gustaba!  

También recuerdo que por la cercanía, las televisiones tomaban la señal de USA y casi los canales mexicanos no se veían o eran más complicados... Ah recuerdo despertar en las mañanas que visitaba a los abuelos y prender la TV para ver los anuncios y caricaturas en inglés... me encantaban los anuncios, tantos productos tan coloridos y novedosos tanta variedad a elegir ... les recuerdo que en ese México antes del TLC no había mucha variedad como hoy, no había competencia, habia grandes monopolios dominando nuestros mercados... solo había una marca de Pan, una marca de Galletas, una marca de Totillas, dos marcas de pasta dental, etc.... todo era limitado y no había competencia.  Mi percepción de las tiendas a esa edad era que eran lugares grises vs las tiendas coloridas de USA.

Ir y regresar de USA a Mexico era como si nada, podías ir todos los días o incluso varias veces en un día.   Había gente que estudiaba en USA pero vivía en Mexico, lo mismo gente que trabajaba en USA y regresaba a casa en Mexico incluso al revés.   En ese tiempo no era un problema tan marcado el tipo de cambio. Y era fácil obtener tu visa para que cruzar fronteras fuera accesible.

Esas fronteras fáciles de cruzar debieron quedarse para siempre, México debió crecer igual que su vecino, porque aun hoy tan saqueado por los malos gobiernos, sigue habiendo mucha riqueza.

Que bendición haber vivido eso, que nostalgia que hoy sea tan complicado para muchos cruzar fronteras.   Ojalá un día hubiera menos fronteras y más humanos amándose y transitando el mundo sin banderas.

Edith Reyna-Villarreal