Ésta es una de las más importantes (y menos comprendidas actividades) de la Vida, que la radiación y sentimiento que salen en la preparación de la comida afecta a cada uno de los que participan de ella, y que esta actividad debe realizarse sin prisa, en paz y felicidad.
Sería mejor que un individuo no comiera del todo, que ingerir comida que ha sido preparada bajo sentimientos de angustia, resentimientos, depresión o cualquier presión externa, ya que la sustancia de la corriente de vida que realiza el servicio fluye dentro de esa comida y es ingerida, convirtiéndose de hecho en la energía del receptor.
¿Donde queda, entonces, la gente que come la mayoría de sus comidas "afuera"? Quizás aquí está la explicación a más de cuatro cosas que les pasa por la cabeza o el corazón, las cuales no pueden explicarse y son causa de gran aflicción para ellos.
“¡Qué rica comida!”, solíamos decirle a mamá cada vez que nos sentábamos a comer. No importaba lo que cocinara, mis hermanos y yo le decíamos que la comida sabía deliciosa, y quedábamos satisfechos. Aún en tiempos de carestía, haciendo malabares, ella se las ingeniaba para que los alimentos resultaran apetitosos. ¿Qué era lo que les ponía?, ¿por qué siempre nos gustó el sabor de sus comidas? Descubrí, pasados muchos años, cuál era ese ingrediente especial: AMOR.
¿Donde queda, entonces, la gente que come la mayoría de sus comidas "afuera"? Quizás aquí está la explicación a más de cuatro cosas que les pasa por la cabeza o el corazón, las cuales no pueden explicarse y son causa de gran aflicción para ellos.
“¡Qué rica comida!”, solíamos decirle a mamá cada vez que nos sentábamos a comer. No importaba lo que cocinara, mis hermanos y yo le decíamos que la comida sabía deliciosa, y quedábamos satisfechos. Aún en tiempos de carestía, haciendo malabares, ella se las ingeniaba para que los alimentos resultaran apetitosos. ¿Qué era lo que les ponía?, ¿por qué siempre nos gustó el sabor de sus comidas? Descubrí, pasados muchos años, cuál era ese ingrediente especial: AMOR.
Ese ingrediente tiene un poder: atrae a los miembros de tu familia, los une, les hace sentir que les gusta tu compañía, pasas un buen momento y se vuelven a apreciar unos a otros. Cuando haces cosas por tus semejantes, en este caso tu familia, transmites tus propios sentimientos, tu amor, tu deseo de nutrirlos, de prolongarles la vida, de darles salud y bienestar. Al mismo tiempo, cuando los miembros de tu familia aprecian el trabajo, el tiempo y dedicación que has proporcionado, el beneficio es recíproco y quedas con la satisfacción del ingrediente añadido, que retornará en cantidades mayores.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario