El cambio de año nos da la oportunidad de hacer una pequeña pausa para hacer un recuento.
No hay nada mágico ni particular pues es un cambio de día, son las mismas 24 horas, sin embargo nos sirve para tomar decisiones, hacer propósitos y tener un refrescante comienzo.
Se abre la posibilidad de cambio, o de tomar la decisión de seguir igual, pero la responsabilidad está en cada uno. También se abre la ventana del agradecimiento, por tantas bendiciones, por todo lo que llegó y se fue, por tanto amor demostrado, por tanta gente nueva, por tantos momentos, por tanto aprendizaje.
En mi caso llevo un par de meses trabajando en cambios necesarios para que el inicio del nuevo año se den algunas cosas mejores, así cada uno tiene sus técnicas, pero esta es nueva para mi también.
La balanza siempre es positiva, la gratitud es siempre a nuestro Dios por sus bendiciones y por acompañarnos en cada momento y situación.
Para mi este fue un año especial, como cada año lo es, pero en éste hice el viaje que mucho tiempo soñé hacer, estar en Japón, caminar, vivir, conocer y conectar con tanta gente maravillosa. Estar en familia y conocer nueva gente que se queda en el corazón.
Así que mi deseo para ti es que en este 2018 dejes que el amor y compasión fluyan desde tu corazón para que puedas dejar salir a la mejor versión de ti mismo, y por ende puedas crear un mejor futuro para los que te rodean, y así como una pequeña onda que se expande puedas contribuir a tener un mejor planeta para todos.
Amor, compasión, pasión, paz, nuevas oportunidades, alegrías, salud y sobre todo entusiasmo
¡Los abrazo con el corazón!
¡Feliz Año!
Edith Reyna
Una serendipia es ...
Una serendipia es un descubrimiento o hallazgo afortunado e inesperado. Así que espero que lo que aquí encuentres sea afortunado y útil para tu crecimiento, además que sea inesperado pues siempre se recibe todo gratamente cuando no tienes expectativas.
31 diciembre 2017
30 diciembre 2017
La soledad contiene su propia cura
Mientras más profundamente te dejes caer en esta libertad existencial que es tu derecho de nacimiento y tu verdadero hogar, y mientras más te relajes fuera de la mente y su condicionamiento infinitamente complejo, sus ideales imposibles y esos roles habituales que habitas para escapar de ti mismo, más encontrarás los dolores y anhelos y ansiedades de los que siempre estuviste huyendo en tu impulso adictivo hacia algún tipo de 'seguridad' psicológica...en un cosmos inherentemente inseguro.
Mientras más libre eres, mientras menos identificado con la narrativa, caerás más en esta simplicidad divina, y te sentirás con menos base y con menos techo. Pero esto no es algo malo. No tener base es el camino, la verdad, la vida, como es conocida íntimamente la libertad pura. Como enseñó el Buda, no hay terreno en ninguna parte. Nada a que aferrarse. No hay hogar. No hay descanso. Excepto aquí en la presencia. Excepto en la respiración.
La mente no es base para ti. La mente no es lo que tú eres. AHORA es la única seguridad.
¿El precio de la libertad, entonces? Un compromiso incesante con la luz y la oscuridad de la experiencia. Con la alegría y la tristeza de la vida, el aburrimiento y la dicha y la inseguridad de todo. Una caída libre en ti mismo. Una inmersión profunda en aquello de lo que no se puede escapar. Hay una profunda soledad inherente en esto. Es la soledad de planetas distantes girando en infinito espacio. Es la soledad de estar en el punto de creación y creatividad puras, siempre. Es la soledad de dejar el mundo y confrontar a los preciosos momentos que pasan. Es la soledad que existe en el centro de cada ser. Es la soledad de la presencia pura. Es la soledad que es la comprensión, 'Estoy viviendo y estoy muriendo y no puedo resolver este Misterio, ni tampoco los demás, y nadie puede respirar por mí, morir por mí, amar por mí...'
Esta es una soledad sagrada que no es mala, o errónea, o pecaminosa o vergonzosa, o una señal de que estás roto o dañado o incompleto de alguna forma, sino que de hecho una soledad que nutre, conforta, da descanso y vida, una puerta muy mal entendida hacia la paz, el amor propio, el contento y la alegría. Es una soledad que jamás se va, que no está relacionada con cuánta gente te rodea o cuán 'popular' eres, que está construida sobre el Ser mismo, que te llama a casa y a ella momento a momento. De vuelta aquí. Al cuerpo. A la tierra. Al día a medida que se despliega.
Fuera de la mente y dentro de esta presencia. A esta intimidad con la vida. Es una soledad que no te separa o aísla, sino que te conecta profundamente con toda la humanidad. Es una soledad saludable, y quedarse requiere coraje.
Entonces cuando dejas de huir hacia tus adicciones designadas para ayudarte a 'escapar' de la soledad, y en cambio te vuelves íntimo con esta soledad, la nutres, la mantienes cerca, respiras amorosamente en ella, la comprendes, conversas con ella, la invitas a entrar, entonces entiendes la soledad en cada corazón humano, el anhelo irresoluble en el centro del vientre de todos, y tu corazón se abre de golpe con compasión, y ya no te sientes solo. Sales de la historia 'Estoy solo y he sido abandonado...' y te conectas profundamente con la exquisita y natural y buena y suave y amistosa soledad que es pura libertad, pura vastedad, puro Saber.
Y tocas la vida en el punto de creación.
La soledad contiene su propia cura.
Sumérgete.
Jeff Foster
Mientras más libre eres, mientras menos identificado con la narrativa, caerás más en esta simplicidad divina, y te sentirás con menos base y con menos techo. Pero esto no es algo malo. No tener base es el camino, la verdad, la vida, como es conocida íntimamente la libertad pura. Como enseñó el Buda, no hay terreno en ninguna parte. Nada a que aferrarse. No hay hogar. No hay descanso. Excepto aquí en la presencia. Excepto en la respiración.
La mente no es base para ti. La mente no es lo que tú eres. AHORA es la única seguridad.
¿El precio de la libertad, entonces? Un compromiso incesante con la luz y la oscuridad de la experiencia. Con la alegría y la tristeza de la vida, el aburrimiento y la dicha y la inseguridad de todo. Una caída libre en ti mismo. Una inmersión profunda en aquello de lo que no se puede escapar. Hay una profunda soledad inherente en esto. Es la soledad de planetas distantes girando en infinito espacio. Es la soledad de estar en el punto de creación y creatividad puras, siempre. Es la soledad de dejar el mundo y confrontar a los preciosos momentos que pasan. Es la soledad que existe en el centro de cada ser. Es la soledad de la presencia pura. Es la soledad que es la comprensión, 'Estoy viviendo y estoy muriendo y no puedo resolver este Misterio, ni tampoco los demás, y nadie puede respirar por mí, morir por mí, amar por mí...'
Esta es una soledad sagrada que no es mala, o errónea, o pecaminosa o vergonzosa, o una señal de que estás roto o dañado o incompleto de alguna forma, sino que de hecho una soledad que nutre, conforta, da descanso y vida, una puerta muy mal entendida hacia la paz, el amor propio, el contento y la alegría. Es una soledad que jamás se va, que no está relacionada con cuánta gente te rodea o cuán 'popular' eres, que está construida sobre el Ser mismo, que te llama a casa y a ella momento a momento. De vuelta aquí. Al cuerpo. A la tierra. Al día a medida que se despliega.
Fuera de la mente y dentro de esta presencia. A esta intimidad con la vida. Es una soledad que no te separa o aísla, sino que te conecta profundamente con toda la humanidad. Es una soledad saludable, y quedarse requiere coraje.
Entonces cuando dejas de huir hacia tus adicciones designadas para ayudarte a 'escapar' de la soledad, y en cambio te vuelves íntimo con esta soledad, la nutres, la mantienes cerca, respiras amorosamente en ella, la comprendes, conversas con ella, la invitas a entrar, entonces entiendes la soledad en cada corazón humano, el anhelo irresoluble en el centro del vientre de todos, y tu corazón se abre de golpe con compasión, y ya no te sientes solo. Sales de la historia 'Estoy solo y he sido abandonado...' y te conectas profundamente con la exquisita y natural y buena y suave y amistosa soledad que es pura libertad, pura vastedad, puro Saber.
Y tocas la vida en el punto de creación.
La soledad contiene su propia cura.
Sumérgete.
Jeff Foster
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29 diciembre 2017
El perdón no borra el pasado
El perdón no borra el pasado, revive el presente y reescribe el futuro
Perdonar es también quitarle el control de tus emociones a los demás, no es estar de acuerdo con lo que te hacen, es simplemente un acto de amor a ti mismo.
Perdonar es una de las herramientas que Dios nos regala para lograr descubrir el cielo en vida.
Perdonar es liberarte, es respetarte, es amarte.
Perdonarte a ti mismo es reencontrarte con tu propia vida, con tu cielo, con tu felicidad, con Dios.
Que tengan la mejor semana de su vida
Dios nos bendice, es una buena oportunidad de sonreír más y quejarnos menos
Héctor Molina
Perdonar es también quitarle el control de tus emociones a los demás, no es estar de acuerdo con lo que te hacen, es simplemente un acto de amor a ti mismo.
Perdonar es una de las herramientas que Dios nos regala para lograr descubrir el cielo en vida.
Perdonar es liberarte, es respetarte, es amarte.
Perdonarte a ti mismo es reencontrarte con tu propia vida, con tu cielo, con tu felicidad, con Dios.
Que tengan la mejor semana de su vida
Dios nos bendice, es una buena oportunidad de sonreír más y quejarnos menos
Héctor Molina
27 diciembre 2017
Consejos Rumi
Le preguntaron a Rumi,
¿Qué es el veneno?- Cualquier cosa más allá de lo que necesitamos es veneno. Puede ser el poder, la pereza, la comida, el ego, la ambición, el miedo, la ira, o lo que sea ...
¿Qué es el miedo? - La no aceptación de la incertidumbre. Si aceptamos la incertidumbre, se convierte en aventura.
¿Qué es la envidia? - La no aceptación de la bienaventuranza en el otro. Si lo aceptamos, se torna en inspiración.
¿Qué es la ira?- La no aceptación de lo que está más allá de nuestro control. Si aceptamos, se convierte en tolerancia.
¿Qué es el odio?- La No aceptación de las personas como son. Si las aceptamos incondicionalmente, a continuación, se convierte en amor.
¿Qué es la madurez espiritual?
1. Es cuando se deja de tratar de cambiar a los demás y nos concentramos en cambiarnos a nosotros mismos.
2. Es cuando aceptamos a las personas como son.
3. Es cuando entendemos que todos están acertados según su própia perspectiva.
4. Es cuando se aprende a "dejar ir".
5. Es cuando se es capaz de no tener "expectativas" en una relación, y damos de nosotros mismos por el placer de dar.
6. Es cuando comprendemos que lo que hacemos, lo hacemos para nuestra propia paz.
7. Es cuando uno deja de demostrar al mundo lo inteligente que es.
8. Es cuando dejamos de buscar la aprobación de los demás.
9. Es cuando paramos de compararnos con los demás.
10. Es cuando se está en paz consigo mismo.
11. La madurez espiritual es cuando somos capaces de distinguir entre "necesidad" y "querer" y somos capaces de dejar ir ese querer ...
12. Se gana la madurez espiritual cuando dejamos de anexar la "felicidad" a las cosas materiales.
¿Qué es el veneno?- Cualquier cosa más allá de lo que necesitamos es veneno. Puede ser el poder, la pereza, la comida, el ego, la ambición, el miedo, la ira, o lo que sea ...
¿Qué es el miedo? - La no aceptación de la incertidumbre. Si aceptamos la incertidumbre, se convierte en aventura.
¿Qué es la envidia? - La no aceptación de la bienaventuranza en el otro. Si lo aceptamos, se torna en inspiración.
¿Qué es la ira?- La no aceptación de lo que está más allá de nuestro control. Si aceptamos, se convierte en tolerancia.
¿Qué es el odio?- La No aceptación de las personas como son. Si las aceptamos incondicionalmente, a continuación, se convierte en amor.
¿Qué es la madurez espiritual?
1. Es cuando se deja de tratar de cambiar a los demás y nos concentramos en cambiarnos a nosotros mismos.
2. Es cuando aceptamos a las personas como son.
3. Es cuando entendemos que todos están acertados según su própia perspectiva.
4. Es cuando se aprende a "dejar ir".
5. Es cuando se es capaz de no tener "expectativas" en una relación, y damos de nosotros mismos por el placer de dar.
6. Es cuando comprendemos que lo que hacemos, lo hacemos para nuestra propia paz.
7. Es cuando uno deja de demostrar al mundo lo inteligente que es.
8. Es cuando dejamos de buscar la aprobación de los demás.
9. Es cuando paramos de compararnos con los demás.
10. Es cuando se está en paz consigo mismo.
11. La madurez espiritual es cuando somos capaces de distinguir entre "necesidad" y "querer" y somos capaces de dejar ir ese querer ...
12. Se gana la madurez espiritual cuando dejamos de anexar la "felicidad" a las cosas materiales.
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26 diciembre 2017
Un Brindis Por el Año Nuevo - Y Por el Viejo
¡Felicitaciones! En menos de una semana, habrá pasado otro año del calendario. ¿Está listo para que comience 2018? ¿Cuáles son sus pensamientos sobre el año que está a punto de concluir? ¿Fue uno de tus mejores años, quizás incluso el mejor año que has experimentado? ¿O fue un año que preferirías olvidar y se alegra de que haya terminado?
Siendo realistas, pasar del 31 de diciembre al 1 de enero es simplemente el transcurrir otras 24 horas. Sin embargo, para muchos de nosotros significa mucho más que eso. Para algunos, existe la esperanza de que el impulso positivo del año pasado continúe e incorpore al nuevo año calendario. Para otros, representa un momento para un nuevo comienzo, nuevos comienzos, tal vez incluso un "rehacer". En cualquier caso, ver el último número en el año calendario aumentar en uno típicamente ofrece una esperanza renovada, junto con las expectativas de cosas buenas en el futuro.
Para muchos, esta transición significa tanto un tiempo para volver a evaluar lo que sucedió en los últimos 365 días y un momento para anticipar qué oportunidades, desafíos y sorpresas pueden tener por delante en los próximos 365. Me hago preguntas como: ¿Qué salió bien? ¿Qué podría haber hecho mejor? ¿Cómo puedo aprender del pasado para obtener mejores resultados en el futuro?
Lamentablemente, en muchos casos, pasar de un año a otro exige mucho más que dar vuelta la página en un calendario. A veces implica sentimientos de arrepentimiento, incluso remordimiento. Algunos estarían de acuerdo con el autor William Faulkner, quien dijo: "El pasado nunca está muerto. Ni siquiera es pasado". Entonces, como esperamos que vengan cosas buenas, ¿cómo lidiamos con hechos o circunstancias que deseamos poder deshacer, o al menos eliminar de nuestra memoria? La Biblia ofrece algunos principios útiles a considerar:
No permita que el pasado tenga el control. Al darnos cuenta de que aún no hemos "llegado", de que todavía tenemos sueños que perseguir y objetivos que alcanzar, no podemos seguir adelante al continuar concentrándonos en el pasado. El apóstol Pablo escribió: "No quiero decir que ya haya logrado estas cosas ni que ya haya alcanzado la perfección; pero sigo adelante a fin de hacer mía esa perfección para la cual Cristo Jesús primeramente me hizo suyo. 13 No, amados hermanos, no lo he logrado, pero me concentro únicamente en esto: olvido el pasado y fijo la mirada en lo que tengo por delante, y así 14 avanzo hasta llegar al final de la carrera para recibir el premio celestial al cual Dios nos llama por medio de Cristo Jesús." (Filipenses 3: 12-14).
Reconocer que el futuro no necesita duplicar el pasado. Podemos obtener valiosas lecciones del pasado, incluidos nuestros fracasos, pero luego debemos evitar "estancarnos" al darles un enfoque indebido. "Olvida las cosas anteriores; no te detengas en el pasado Mira, ¡estoy haciendo algo nuevo! Ahora brota; ¿No lo percibes?" (Isaías 43: 18-19).
Recuerde que Dios tiene poder para transformarse. "Nuevo y mejorado" es una promesa popular para muchos productos. A veces eso es lo que deseamos para nosotros mismos, no solo un pequeño retoque o pequeños ajustes, sino poder prescindir del viejo yo y convertirnos en un "yo" totalmente nuevo y notablemente transformado. Para los seguidores de Jesucristo, este es el promesa que Dios ofrece: "Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva criatura; las cosas viejas pasaron; he aquí, han sucedido cosas nuevas" (2 Corintios 5:17). "... así como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, también nosotros podemos andar en la novedad de la vida" (Romanos 6: 4)
Mirando hacia el nuevo año, ¿qué expectativas y esperanzas tiene?
¿Qué tan fácil es para usted seguir el ejemplo del apóstol Pablo, que escribió sobre "olvidar lo que está atrás y esforzarse hacia lo que está por venir"?
Siendo realistas, pasar del 31 de diciembre al 1 de enero es simplemente el transcurrir otras 24 horas. Sin embargo, para muchos de nosotros significa mucho más que eso. Para algunos, existe la esperanza de que el impulso positivo del año pasado continúe e incorpore al nuevo año calendario. Para otros, representa un momento para un nuevo comienzo, nuevos comienzos, tal vez incluso un "rehacer". En cualquier caso, ver el último número en el año calendario aumentar en uno típicamente ofrece una esperanza renovada, junto con las expectativas de cosas buenas en el futuro.
Para muchos, esta transición significa tanto un tiempo para volver a evaluar lo que sucedió en los últimos 365 días y un momento para anticipar qué oportunidades, desafíos y sorpresas pueden tener por delante en los próximos 365. Me hago preguntas como: ¿Qué salió bien? ¿Qué podría haber hecho mejor? ¿Cómo puedo aprender del pasado para obtener mejores resultados en el futuro?
Lamentablemente, en muchos casos, pasar de un año a otro exige mucho más que dar vuelta la página en un calendario. A veces implica sentimientos de arrepentimiento, incluso remordimiento. Algunos estarían de acuerdo con el autor William Faulkner, quien dijo: "El pasado nunca está muerto. Ni siquiera es pasado". Entonces, como esperamos que vengan cosas buenas, ¿cómo lidiamos con hechos o circunstancias que deseamos poder deshacer, o al menos eliminar de nuestra memoria? La Biblia ofrece algunos principios útiles a considerar:
No permita que el pasado tenga el control. Al darnos cuenta de que aún no hemos "llegado", de que todavía tenemos sueños que perseguir y objetivos que alcanzar, no podemos seguir adelante al continuar concentrándonos en el pasado. El apóstol Pablo escribió: "No quiero decir que ya haya logrado estas cosas ni que ya haya alcanzado la perfección; pero sigo adelante a fin de hacer mía esa perfección para la cual Cristo Jesús primeramente me hizo suyo. 13 No, amados hermanos, no lo he logrado, pero me concentro únicamente en esto: olvido el pasado y fijo la mirada en lo que tengo por delante, y así 14 avanzo hasta llegar al final de la carrera para recibir el premio celestial al cual Dios nos llama por medio de Cristo Jesús." (Filipenses 3: 12-14).
Reconocer que el futuro no necesita duplicar el pasado. Podemos obtener valiosas lecciones del pasado, incluidos nuestros fracasos, pero luego debemos evitar "estancarnos" al darles un enfoque indebido. "Olvida las cosas anteriores; no te detengas en el pasado Mira, ¡estoy haciendo algo nuevo! Ahora brota; ¿No lo percibes?" (Isaías 43: 18-19).
Recuerde que Dios tiene poder para transformarse. "Nuevo y mejorado" es una promesa popular para muchos productos. A veces eso es lo que deseamos para nosotros mismos, no solo un pequeño retoque o pequeños ajustes, sino poder prescindir del viejo yo y convertirnos en un "yo" totalmente nuevo y notablemente transformado. Para los seguidores de Jesucristo, este es el promesa que Dios ofrece: "Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva criatura; las cosas viejas pasaron; he aquí, han sucedido cosas nuevas" (2 Corintios 5:17). "... así como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, también nosotros podemos andar en la novedad de la vida" (Romanos 6: 4)
Mirando hacia el nuevo año, ¿qué expectativas y esperanzas tiene?
¿Qué tan fácil es para usted seguir el ejemplo del apóstol Pablo, que escribió sobre "olvidar lo que está atrás y esforzarse hacia lo que está por venir"?
Robert J. Tamasy
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22 diciembre 2017
¿Estás perdido? Simplemente detente...
En un mundo cada vez más veloz es fácil verse arrastrado por los acontecimientos; sin darnos cuenta perseguimos metas, noticias, eventos y nos alejamos de nuestro centro.
Si quieres reencontrarte contigo mismo, simplemente… detente.
A continuación un poema del poeta americano David Russel Wagoner basado en las enseñanzas que los indios de la costa noroeste de EEUU a sus hijos sobre cómo actuar si se perdían en el bosque.
Si quieres reencontrarte contigo mismo, simplemente… detente.
Perdido
Detente.
Detente.
Los árboles frente a ti y los arbustos a tu lado no están perdidos.
El lugar donde estás se llama Aquí.
Y debes tratarlo como a un poderoso desconocido,
debes pedir permiso para conocerlo y ser conocido.
El bosque respira.
Y debes tratarlo como a un poderoso desconocido,
debes pedir permiso para conocerlo y ser conocido.
El bosque respira.
Escucha.
Te responde, he creado este lugar a tu alrededor,
si te vas, puedes regresar diciendo Aquí.
No hay dos árboles iguales para el cuervo.
No hay dos ramas iguales para el gorrión.
Si el valor de un árbol o un arbusto se pierde en ti,
sin duda estás perdido.
si te vas, puedes regresar diciendo Aquí.
No hay dos árboles iguales para el cuervo.
No hay dos ramas iguales para el gorrión.
Si el valor de un árbol o un arbusto se pierde en ti,
sin duda estás perdido.
Detente.
El bosque sabe dónde estás.
Déjale que te encuentre.
David Russel Wagoner
David Russel Wagoner
(Travelling Light, Collected and New Poems (1999)
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20 diciembre 2017
¿Conocidos o amigos?
En relación a un post que he publicado en mi FB me vino en gana escribir un blog después de mucho tiempo. El asunto es que me di cuenta que no fui entendido. El concepto que estaba escondido atrás de dos líneas, probablemente requiere un poco más de espacio para ser explícito.
El post decía “Si tienes más conocidos que amigos, significa que ya vives en un infierno de soledad”, la mayoría lo tomó como una crítica hacia la soledad, pero al contrario, era una crítica hacia quién no es capaz de ver en cualquier “conocido” un “amigo”. Personalmente amo la soledad, paso mucho más tiempo solo que en compañía y casi todo lo que he hecho en mi vida lo he hecho solo, y me encantó. Lo que quería decir es que cuando a los demás les pones el título de “conocido”, significa solo que has perdido la capacidad de ver los demás como tus hermanos de esta madre tierra, y por lo tanto “Amigos”.
No es la soledad que crea el infierno, es la dificultad de tener el corazón abierto. Porque si tienes el corazón abierto no hay más conocidos, hay solo amigos. Puedes pasártela solo todo el tiempo pero sientes que eres parte del todo, que eres rodeado de amigos, de hermanos, sientes que eres rodeado de aquella cualidad divina que se llama amistad, y esto sí que te lleva al paraíso. Al contrario, puede estar siempre rodeado de gente, pero si no los puedes considerar amigos, sino conocidos, tu soledad se vuelve un infierno.
Otra vez no quiero ser malentendido. No estoy diciendo que te tienen que caer bien todos, volviéndote una especie de san Francisco. Es obvio que hay amigos que prefieres evitar, pero esto no quita el hecho de reconocerles las cualidades que lo hacen “amigos”. Por lo tanto cuidado: si tu soledad es una elección que viene desde la consideración que la gente es mala y no merece tu amistad, tu estar solo se vuelve una prisión segura, acogedora y tan bonita que se parece a la libertad, pero una prisión se queda. Porque con el corazón cerrado la vista se vuelve árida como el desierto.
Mi opinión es: si descubres que tienes más conocidos que amigos, trata de hacer algo para abrir el corazón, tómate un riesgo, date un chance. Esto te llevará en paraíso.
Prem Dayal
El post decía “Si tienes más conocidos que amigos, significa que ya vives en un infierno de soledad”, la mayoría lo tomó como una crítica hacia la soledad, pero al contrario, era una crítica hacia quién no es capaz de ver en cualquier “conocido” un “amigo”. Personalmente amo la soledad, paso mucho más tiempo solo que en compañía y casi todo lo que he hecho en mi vida lo he hecho solo, y me encantó. Lo que quería decir es que cuando a los demás les pones el título de “conocido”, significa solo que has perdido la capacidad de ver los demás como tus hermanos de esta madre tierra, y por lo tanto “Amigos”.
No es la soledad que crea el infierno, es la dificultad de tener el corazón abierto. Porque si tienes el corazón abierto no hay más conocidos, hay solo amigos. Puedes pasártela solo todo el tiempo pero sientes que eres parte del todo, que eres rodeado de amigos, de hermanos, sientes que eres rodeado de aquella cualidad divina que se llama amistad, y esto sí que te lleva al paraíso. Al contrario, puede estar siempre rodeado de gente, pero si no los puedes considerar amigos, sino conocidos, tu soledad se vuelve un infierno.
Otra vez no quiero ser malentendido. No estoy diciendo que te tienen que caer bien todos, volviéndote una especie de san Francisco. Es obvio que hay amigos que prefieres evitar, pero esto no quita el hecho de reconocerles las cualidades que lo hacen “amigos”. Por lo tanto cuidado: si tu soledad es una elección que viene desde la consideración que la gente es mala y no merece tu amistad, tu estar solo se vuelve una prisión segura, acogedora y tan bonita que se parece a la libertad, pero una prisión se queda. Porque con el corazón cerrado la vista se vuelve árida como el desierto.
Mi opinión es: si descubres que tienes más conocidos que amigos, trata de hacer algo para abrir el corazón, tómate un riesgo, date un chance. Esto te llevará en paraíso.
Prem Dayal
18 diciembre 2017
Ligero de equipaje
En la novela de Julio Verne “La isla misteriosa”, se narra la historia de cinco hombres que se escapan de un campo de prisioneros durante la Guerra Civil estadounidense robando un globo. Al elevarse en el aire se dan cuenta que el viento los lleva hacia el océano. Mientras observan cómo la tierra firme desaparece en el horizonte, se preguntan cuánto tiempo lograrán mantener el globo en el aire.
A medida que pasan las horas y el globo se aproxima a la superficie del océano, los hombres deciden que deben arrojar algo pesado a bordo porque no tienen forma de calentar el aire del globo.
A regañadientes, arrojan zapatos, abrigos y armas, y los preocupados viajeros sienten que su globo se eleva. Sin embargo, al poco tiempo descubren que el globo se acerca una vez más de forma peligrosa a la superficie de las olas, así que lanzan al mar los alimentos. Para desdicha, esto también fue solo una solución temporal y la nave amenaza de nuevo bajar los hombres al mar.
Uno de ellos tiene una idea: pueden atar las cuerdas que sostienen la barquilla y sentarse en ellas. Luego sueltan la barquilla que queda debajo de ellos. Al hacerlo, notan cómo el globo se eleva otra vez. A los pocos minutos, divisan tierra. Los cinco saltan al agua y nadan hasta la isla. Sobrevivieron porque fueron capaces de discernir la diferencia entre lo que era necesario de verdad y lo que no lo era. Las cosas sin las cuales creían que no podrían vivir eran las mismas cargas que casi les cuesta la vida.
Cada vez que me toca viajar por varios días para equipar un grupo de líderes me enfrento al mismo dilema al empacar. ¿Qué llevo y que no? ¿Qué es esencial? ¿Necesitare esto o lo otro? No siempre mi anfitrión en otro país entiendo la necesidad que tengo de información al respecto para tomar una decisión sensata. Con frecuencia por ello terminan llevando más de lo que realmente necesito. Lo hago mejor cada año, pero todavía encuentro desafiante la incertidumbre de encontrarme en un contexto espiritual, cultural, social y geográfico diferente.
Cuando empezaba el ministerio a los líderes y pastores hace unos seis años, llegó a mis manos el libro de Anthony Di Mello, un sacerdote jesuita, quien había escrito sobre el principio de viajar ligero de equipaje. Nada de lo que usualmente consideramos esencial para nuestra jornada lo es realmente. Igual que no podemos cambiar nuestro pasado, tampoco podemos conocer nuestro futuro. Solo tenemos el presente, y lo que hagamos en el impactará definitivamente nuestro futuro.
Por ello, es necesario autoevaluarnos. Si no lo hacemos será muy difícil que distingamos lo importante de lo urgente, lo eterno de lo temporal, lo esencial de lo superficial. Como los pasajeros en el globo, nos encontramos continuamente expuesto a tocar tierra desastrosamente. Pero, hay preguntas relevantes que nos pueden ayudar a cumplir nuestra misión conforme al plan de Dios y Su propósito, y a la vez alcanzar la meta.
Primero que todo, debes decidir autoevaluarte: ¿Por qué no hacer una evaluación sincera de las cosas que quizá te frenen hoy?
Segundo, necesitas diferenciar entre lo temporal y lo eternos de tus necesidades. Pregúntate, ¿Son necesidades físicas o espirituales tuyas o de alguien que amas? Y ¿Cómo sería tu vida sin ellas?
Tercero, si eliminas de las necesidades temporales, ¿dispondrías de más tiempo para las cosas en tu vida que importan de verdad?
Hebreos 12:1 (LBLA)
"Por tanto, puesto que tenemos en derredor nuestro tan gran nube de testigos, despojémonos también de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos envuelve, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,"
Hoy es todo lo que tienes para decidir correctamente. Todo lo que acumulas en un abrir y cerrar de ojos dejará de ser tuyo para pertenecer a otros, como antes perteneció a otros. Todos tenemos necesidades materiales, pero ellas no son la razón de nuestra vida, ni satisfacerlas es nuestra visión. Debemos vivir por una visión mayor a nuestras necesidades y con peso eterno.
Pídele a Dios esta víspera de Navidad que te muestre cómo podrías mejorar tu vida si haces algunos cambios y si eliminas algunas cosas que te agobian para emprender tu jornada más ligera de equipaje.
Juan Carlos Flores Zúñiga
A medida que pasan las horas y el globo se aproxima a la superficie del océano, los hombres deciden que deben arrojar algo pesado a bordo porque no tienen forma de calentar el aire del globo.
A regañadientes, arrojan zapatos, abrigos y armas, y los preocupados viajeros sienten que su globo se eleva. Sin embargo, al poco tiempo descubren que el globo se acerca una vez más de forma peligrosa a la superficie de las olas, así que lanzan al mar los alimentos. Para desdicha, esto también fue solo una solución temporal y la nave amenaza de nuevo bajar los hombres al mar.
Uno de ellos tiene una idea: pueden atar las cuerdas que sostienen la barquilla y sentarse en ellas. Luego sueltan la barquilla que queda debajo de ellos. Al hacerlo, notan cómo el globo se eleva otra vez. A los pocos minutos, divisan tierra. Los cinco saltan al agua y nadan hasta la isla. Sobrevivieron porque fueron capaces de discernir la diferencia entre lo que era necesario de verdad y lo que no lo era. Las cosas sin las cuales creían que no podrían vivir eran las mismas cargas que casi les cuesta la vida.
Cada vez que me toca viajar por varios días para equipar un grupo de líderes me enfrento al mismo dilema al empacar. ¿Qué llevo y que no? ¿Qué es esencial? ¿Necesitare esto o lo otro? No siempre mi anfitrión en otro país entiendo la necesidad que tengo de información al respecto para tomar una decisión sensata. Con frecuencia por ello terminan llevando más de lo que realmente necesito. Lo hago mejor cada año, pero todavía encuentro desafiante la incertidumbre de encontrarme en un contexto espiritual, cultural, social y geográfico diferente.
Cuando empezaba el ministerio a los líderes y pastores hace unos seis años, llegó a mis manos el libro de Anthony Di Mello, un sacerdote jesuita, quien había escrito sobre el principio de viajar ligero de equipaje. Nada de lo que usualmente consideramos esencial para nuestra jornada lo es realmente. Igual que no podemos cambiar nuestro pasado, tampoco podemos conocer nuestro futuro. Solo tenemos el presente, y lo que hagamos en el impactará definitivamente nuestro futuro.
Por ello, es necesario autoevaluarnos. Si no lo hacemos será muy difícil que distingamos lo importante de lo urgente, lo eterno de lo temporal, lo esencial de lo superficial. Como los pasajeros en el globo, nos encontramos continuamente expuesto a tocar tierra desastrosamente. Pero, hay preguntas relevantes que nos pueden ayudar a cumplir nuestra misión conforme al plan de Dios y Su propósito, y a la vez alcanzar la meta.
Primero que todo, debes decidir autoevaluarte: ¿Por qué no hacer una evaluación sincera de las cosas que quizá te frenen hoy?
Segundo, necesitas diferenciar entre lo temporal y lo eternos de tus necesidades. Pregúntate, ¿Son necesidades físicas o espirituales tuyas o de alguien que amas? Y ¿Cómo sería tu vida sin ellas?
Tercero, si eliminas de las necesidades temporales, ¿dispondrías de más tiempo para las cosas en tu vida que importan de verdad?
Hebreos 12:1 (LBLA)
"Por tanto, puesto que tenemos en derredor nuestro tan gran nube de testigos, despojémonos también de todo peso y del pecado que tan fácilmente nos envuelve, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,"
Hoy es todo lo que tienes para decidir correctamente. Todo lo que acumulas en un abrir y cerrar de ojos dejará de ser tuyo para pertenecer a otros, como antes perteneció a otros. Todos tenemos necesidades materiales, pero ellas no son la razón de nuestra vida, ni satisfacerlas es nuestra visión. Debemos vivir por una visión mayor a nuestras necesidades y con peso eterno.
Pídele a Dios esta víspera de Navidad que te muestre cómo podrías mejorar tu vida si haces algunos cambios y si eliminas algunas cosas que te agobian para emprender tu jornada más ligera de equipaje.
Juan Carlos Flores Zúñiga
15 diciembre 2017
La comida no es sólo comida
Si una mujer pudiera ver las chispas de Luz que emanan de la punta de sus dedos cuando está cocinando y la sustancia Luz que entra a la comida que maneja, se asombraría de ver cuánto de sí ella carga dentro de la comida que prepara para su familia y amigos.
Ese ingrediente tiene un poder: atrae a los miembros de tu familia, los une, les hace sentir que les gusta tu compañía, pasas un buen momento y se vuelven a apreciar unos a otros. Cuando haces cosas por tus semejantes, en este caso tu familia, transmites tus propios sentimientos, tu amor, tu deseo de nutrirlos, de prolongarles la vida, de darles salud y bienestar. Al mismo tiempo, cuando los miembros de tu familia aprecian el trabajo, el tiempo y dedicación que has proporcionado, el beneficio es recíproco y quedas con la satisfacción del ingrediente añadido, que retornará en cantidades mayores.
Ésta es una de las más importantes (y menos comprendidas actividades) de la Vida, que la radiación y sentimiento que salen en la preparación de la comida afecta a cada uno de los que participan de ella, y que esta actividad debe realizarse sin prisa, en paz y felicidad.
Sería mejor que un individuo no comiera del todo, que ingerir comida que ha sido preparada bajo sentimientos de angustia, resentimientos, depresión o cualquier presión externa, ya que la sustancia de la corriente de vida que realiza el servicio fluye dentro de esa comida y es ingerida, convirtiéndose de hecho en la energía del receptor.
¿Donde queda, entonces, la gente que come la mayoría de sus comidas "afuera"? Quizás aquí está la explicación a más de cuatro cosas que les pasa por la cabeza o el corazón, las cuales no pueden explicarse y son causa de gran aflicción para ellos.
“¡Qué rica comida!”, solíamos decirle a mamá cada vez que nos sentábamos a comer. No importaba lo que cocinara, mis hermanos y yo le decíamos que la comida sabía deliciosa, y quedábamos satisfechos. Aún en tiempos de carestía, haciendo malabares, ella se las ingeniaba para que los alimentos resultaran apetitosos. ¿Qué era lo que les ponía?, ¿por qué siempre nos gustó el sabor de sus comidas? Descubrí, pasados muchos años, cuál era ese ingrediente especial: AMOR.
¿Donde queda, entonces, la gente que come la mayoría de sus comidas "afuera"? Quizás aquí está la explicación a más de cuatro cosas que les pasa por la cabeza o el corazón, las cuales no pueden explicarse y son causa de gran aflicción para ellos.
“¡Qué rica comida!”, solíamos decirle a mamá cada vez que nos sentábamos a comer. No importaba lo que cocinara, mis hermanos y yo le decíamos que la comida sabía deliciosa, y quedábamos satisfechos. Aún en tiempos de carestía, haciendo malabares, ella se las ingeniaba para que los alimentos resultaran apetitosos. ¿Qué era lo que les ponía?, ¿por qué siempre nos gustó el sabor de sus comidas? Descubrí, pasados muchos años, cuál era ese ingrediente especial: AMOR.
Ese ingrediente tiene un poder: atrae a los miembros de tu familia, los une, les hace sentir que les gusta tu compañía, pasas un buen momento y se vuelven a apreciar unos a otros. Cuando haces cosas por tus semejantes, en este caso tu familia, transmites tus propios sentimientos, tu amor, tu deseo de nutrirlos, de prolongarles la vida, de darles salud y bienestar. Al mismo tiempo, cuando los miembros de tu familia aprecian el trabajo, el tiempo y dedicación que has proporcionado, el beneficio es recíproco y quedas con la satisfacción del ingrediente añadido, que retornará en cantidades mayores.
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14 diciembre 2017
Escuchar
Cuando hablamos de escuchar con compasión, solemos pensar en escuchar a otra persona. Pero debemos escuchar también al niño herido que hay en nuestro interior. A veces precisa toda nuestra atención. Ese pequeñín puede surgir desde lo más profundo de tu conciencia y reclamar tu atención. Si estás atento, oirás su voz pidiendo ayuda. En ese momento, en vez de prestar tu atención a cualquier otra cosa que tengas delante de ti, vuélvete y abraza con ternura al niño herido.
Puedes hablarle directamente con el lenguaje del amor, diciéndole: en el pasado te deje solo. Escapé de ti, ahora lo lamento mucho. Voy a abrazarte. Puedes decirle: Querido estoy aquí para lo que necesites. Voy a cuidarte muy bien. Se que sufres mucho. He estado muy ocupado, te he desatendido pero ahora he aprendido una manera de volver a ti.
Si es necesario puedes llorar junto a ese niño cada vez que lo necesites y puedes sentarte a respirar junto a él. Al inspirar vuelvo a mi niño herido, al espirar cuido bien de mi niño herido.
Thich Nhat Hanh
Thich Nhat Hanh
(El arte de cuidar a tu niño interior)
04 diciembre 2017
El pan no está duro, duro es no tener pan
A veces nos queda alguna pieza de pan después de merendar y al día siguiente decimos: "Este pan está duro" y es muy probable que sí lo esté, pero pensado en ello y en una gran reflexión de Wilder Hernández (Psicólogo destacado) hoy quiero compartir esta frase contigo: "El pan no está duro... duro es no tener pan"
Parece mentira, pero somos especialistas en quejarnos, y la mayoría de las veces nos quejamos sin razón, sin sentido, por tonterías, por egoísmo.
"El pan no está duro... duro es no tener pan" ¿Qué quiere decir esto?
Que el trabajo que tienes no es duro, duro es no tener trabajo.
Que tener el coche dañado no es duro, duro es no tener un coche.
Que por tener el coche dañado y tener que caminar a tomar el autobus eso es duro, no!, eso no es duro, duro es no tener piernas, duro es no poder caminar.
Comer arroz con sardina no es duro, duro es no tener comida.
Perder la causa en algún problema familiar no es duro, duro (y creeme que muy duro!) es perder un familiar.
Decir, TE AMO mirando a los ojos de otra persona no es duro, duro es decirlo frente a una lápida o un féretro donde ya no tienen sentido las palabras.
Quejarse no es duro, duro es no saber ser agradecidos.
Hoy es un buen día para DAR GRACIAS por lo que tenemos y no dejar que nuestra felicidad dependa de algo o de alguien.
"Nuestra felicidad depende de nosotros mismos y de lo agradecido que seamos con lo que tenemos"
Luis Rodriguez
Parece mentira, pero somos especialistas en quejarnos, y la mayoría de las veces nos quejamos sin razón, sin sentido, por tonterías, por egoísmo.
"El pan no está duro... duro es no tener pan" ¿Qué quiere decir esto?
Que el trabajo que tienes no es duro, duro es no tener trabajo.
Que tener el coche dañado no es duro, duro es no tener un coche.
Que por tener el coche dañado y tener que caminar a tomar el autobus eso es duro, no!, eso no es duro, duro es no tener piernas, duro es no poder caminar.
Comer arroz con sardina no es duro, duro es no tener comida.
Perder la causa en algún problema familiar no es duro, duro (y creeme que muy duro!) es perder un familiar.
Decir, TE AMO mirando a los ojos de otra persona no es duro, duro es decirlo frente a una lápida o un féretro donde ya no tienen sentido las palabras.
Quejarse no es duro, duro es no saber ser agradecidos.
Hoy es un buen día para DAR GRACIAS por lo que tenemos y no dejar que nuestra felicidad dependa de algo o de alguien.
"Nuestra felicidad depende de nosotros mismos y de lo agradecido que seamos con lo que tenemos"
Luis Rodriguez
Las Definiciones son una Fregadera
La sociedad ama que tú te definas como “algo” y que creas en la definición que has dado de ti mismo. “¿Quién eres tú? ¿Blanco o negro, derecha o izquierda, alto o bajo, dentro o fuera…?”.
A la sociedad le encanta que tú te definas, porque de lo contrario ¿cómo podría manipularte si no sabe quién eres? Una vez que te has definido los que tienen poder saben cómo reaccionarás a las cosas. Por ejemplo, es muy fácil saber cómo complacer o fastidiar a un católico o a un judío o a uno del Pan o a uno del Chivas.
Definirse a sí mismo como “algo” es como publicar el mapa de tu casa, para que cualquiera pueda meterse y hacer con tu vida lo que quiere. Es por esto que te dan la idea que definirte a ti mismo sea un síntoma de coherencia, de madurez, de consistencia; pero de mi punto de vista se trata de todo lo contrario.
Una persona madura es alguien que es consciente de su unicidad y no alguien que se esconde de forma infantil atrás los colores de un club; y la consistencia es un valor solo cuando eres coherente a ti mismo y no a los ideales y comportamientos de un categorial de definición son una cadena que la sociedad te impone para limitar tus movimientos, porque una vez que te has definido, es inevitable que la gente se espere que tú seas coherente con la definición que has dado de ti mismo. Más inteligente es simplemente ser quien eres, sin caer en ninguna definición. Si tú eres simplemente quién eres, eres libre.
Prem Dayal
A la sociedad le encanta que tú te definas, porque de lo contrario ¿cómo podría manipularte si no sabe quién eres? Una vez que te has definido los que tienen poder saben cómo reaccionarás a las cosas. Por ejemplo, es muy fácil saber cómo complacer o fastidiar a un católico o a un judío o a uno del Pan o a uno del Chivas.
Definirse a sí mismo como “algo” es como publicar el mapa de tu casa, para que cualquiera pueda meterse y hacer con tu vida lo que quiere. Es por esto que te dan la idea que definirte a ti mismo sea un síntoma de coherencia, de madurez, de consistencia; pero de mi punto de vista se trata de todo lo contrario.
Una persona madura es alguien que es consciente de su unicidad y no alguien que se esconde de forma infantil atrás los colores de un club; y la consistencia es un valor solo cuando eres coherente a ti mismo y no a los ideales y comportamientos de un categorial de definición son una cadena que la sociedad te impone para limitar tus movimientos, porque una vez que te has definido, es inevitable que la gente se espere que tú seas coherente con la definición que has dado de ti mismo. Más inteligente es simplemente ser quien eres, sin caer en ninguna definición. Si tú eres simplemente quién eres, eres libre.
Prem Dayal
30 noviembre 2017
Cuando pareciera que todo esté acabado, ¡Respira!
Cuando pareciera que todo esté acabado, ¡¡Respira!!
Siempre encontrarás una razón para disfrutar que respiras aún.
Hoy tenía dos conversaciones simultáneas por mi cel, dos personas diferentes, viviendo vidas diferentes, con miradas diferentes, con perspectivas diferentes, pero sobre todo con esperanzas diferentes.
Por un lado platicaba con una amiga que hoy tiene 27 años, cuando la conocí tenía 18 años, coincidimos en una quimioterapia, que de hecho era su última, ya que solo se la estaba dando para reforzar pues el cáncer había desaparecido, y a los dos años le volvió... Me estaba platicando que ahora los dolores físicos son un poco más fuertes y antes de que yo opinara algo, me dijo: "sí son más fuertes pero siempre busco en mi pensamiento algo que me lleve a un lugar bonito de mi vida, el dolor está ahí, pero ahora trato que no haga daño a mi vida. Me di cuenta que antes sufría mucho puesto que la enfermedad hacía lo suyo y yo alimentaba el dolor con pensamientos totalmente negativos y así me hacía más duros los momentos, se tardaban más tiempo en pasar"
Siguió la charla (algo que yo practico mucho) me dice: "Tomé la decisión de vivir, antes el cáncer no me había matado pero yo por dentro me estaba matando emocionalmente... Hoy me di cuenta que soy dueña de mis pensamientos, de mis decisiones y de lo que mi alma siente, porque antes entre más me encerraba en el dolor, más sufría, entre más me hacía la víctima, peor la pasaba y no sólo yo, hacía que toda la gente que estaba a mi alrededor la pasara mal."
La plática siguió por mucho rato, este es sólo un poquito de lo mucho que platicamos y ella concluyó diciéndome, "yo ahora aliento a mis compañeras de enfermedad, a la gente que me rodea, es más, a veces aliento hasta a quien no me lo pide, pero que yo veo que tiene una cara triste, las aliento a que siempre en la vida hay alguna razón, por más pequeña que sea pero al fin una razón para seguir esforzándose para seguir aprendiendo, para sonreír y buscar ser feliz aún en medio del dolor, para seguir viviendo, para dar gracias por la vida. Lo malo lo combates con cosas buenas, por más mal que estemos algunas personas, siempre encontraremos algo bueno en nuestra vida que hay que resaltar para que lo malo pase pronto".
La otra plática que tenía era otra amiga que se estaba quejando del trabajo, de sus compañeros, del tráfico, de todo el esfuerzo que tiene que hacer, de los quehaceres de su casa, hasta en algunos momentos quejándose de su familia..
Gracias por leerme, entre más ele des poder a lo malo que te suceda, menos se querrá ir y hasta lo bueno lo convertirá en malo. Pero si dentro de las situaciones difíciles de la vida encuentras razones para sonreir (que siempre las hay), lo difícil pasará pronto, pero mientras pasa no te quitará la vida, se los digo por experiencia.
Dios nos bendice, así que a sonreír más y quejarnos menos.
Los quiero mucho
Héctor Molina
Siempre encontrarás una razón para disfrutar que respiras aún.
Hoy tenía dos conversaciones simultáneas por mi cel, dos personas diferentes, viviendo vidas diferentes, con miradas diferentes, con perspectivas diferentes, pero sobre todo con esperanzas diferentes.
Por un lado platicaba con una amiga que hoy tiene 27 años, cuando la conocí tenía 18 años, coincidimos en una quimioterapia, que de hecho era su última, ya que solo se la estaba dando para reforzar pues el cáncer había desaparecido, y a los dos años le volvió... Me estaba platicando que ahora los dolores físicos son un poco más fuertes y antes de que yo opinara algo, me dijo: "sí son más fuertes pero siempre busco en mi pensamiento algo que me lleve a un lugar bonito de mi vida, el dolor está ahí, pero ahora trato que no haga daño a mi vida. Me di cuenta que antes sufría mucho puesto que la enfermedad hacía lo suyo y yo alimentaba el dolor con pensamientos totalmente negativos y así me hacía más duros los momentos, se tardaban más tiempo en pasar"
Siguió la charla (algo que yo practico mucho) me dice: "Tomé la decisión de vivir, antes el cáncer no me había matado pero yo por dentro me estaba matando emocionalmente... Hoy me di cuenta que soy dueña de mis pensamientos, de mis decisiones y de lo que mi alma siente, porque antes entre más me encerraba en el dolor, más sufría, entre más me hacía la víctima, peor la pasaba y no sólo yo, hacía que toda la gente que estaba a mi alrededor la pasara mal."
La plática siguió por mucho rato, este es sólo un poquito de lo mucho que platicamos y ella concluyó diciéndome, "yo ahora aliento a mis compañeras de enfermedad, a la gente que me rodea, es más, a veces aliento hasta a quien no me lo pide, pero que yo veo que tiene una cara triste, las aliento a que siempre en la vida hay alguna razón, por más pequeña que sea pero al fin una razón para seguir esforzándose para seguir aprendiendo, para sonreír y buscar ser feliz aún en medio del dolor, para seguir viviendo, para dar gracias por la vida. Lo malo lo combates con cosas buenas, por más mal que estemos algunas personas, siempre encontraremos algo bueno en nuestra vida que hay que resaltar para que lo malo pase pronto".
La otra plática que tenía era otra amiga que se estaba quejando del trabajo, de sus compañeros, del tráfico, de todo el esfuerzo que tiene que hacer, de los quehaceres de su casa, hasta en algunos momentos quejándose de su familia..
Gracias por leerme, entre más ele des poder a lo malo que te suceda, menos se querrá ir y hasta lo bueno lo convertirá en malo. Pero si dentro de las situaciones difíciles de la vida encuentras razones para sonreir (que siempre las hay), lo difícil pasará pronto, pero mientras pasa no te quitará la vida, se los digo por experiencia.
Dios nos bendice, así que a sonreír más y quejarnos menos.
Los quiero mucho
Héctor Molina
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29 noviembre 2017
No respiras solo(a)
Cuando fuiste un feto,
No podías respirar por ti mismo,
Así que tu madre respiraba por ti.
Su aliento fue tu aliento,
Su sangre fue tu sangre,
Su vida fue tu vida.
Había un pequeño hueco en tu corazón
Llamado “foramen oval”;
Que se cerró probablemente cuando naciste
Al tomar tu primera bocanada de aire.
Gritaste, lloraste,
Te sentiste en shock,
Hasta quizás saliste amoratado,
Hinchado, dolorido, ensangrentado, pequeñito,
Lloraste por tu existencia,
Te lamentaste por la pérdida del vientre materno.
Estabas exhausto/a
Pero estabas vivo/a.
Así que pronto supiste
Que la vida no era todo éxtasis y dicha,
Que también era dolor,
Que era agobio,
Pérdida.
Pero dentro del agobio, había belleza,
Y en la pérdida, amor,
Y esperanza,
Y descubrimiento.
Amigo/a, a veces necesitas llorar,
Balbucear, y gritar,
Y hacer un berrinche,
Y olvidar el futuro y palabras antiguas.
Y volver a regocijarte en una simple respiración,
Y el alegre latido de un corazón sagrado.
Hasta el día de hoy,
No respiras solo/a.
Jeff Foster
No podías respirar por ti mismo,
Así que tu madre respiraba por ti.
Su aliento fue tu aliento,
Su sangre fue tu sangre,
Su vida fue tu vida.
Había un pequeño hueco en tu corazón
Llamado “foramen oval”;
Que se cerró probablemente cuando naciste
Al tomar tu primera bocanada de aire.
Gritaste, lloraste,
Te sentiste en shock,
Hasta quizás saliste amoratado,
Hinchado, dolorido, ensangrentado, pequeñito,
Lloraste por tu existencia,
Te lamentaste por la pérdida del vientre materno.
Estabas exhausto/a
Pero estabas vivo/a.
Así que pronto supiste
Que la vida no era todo éxtasis y dicha,
Que también era dolor,
Que era agobio,
Pérdida.
Pero dentro del agobio, había belleza,
Y en la pérdida, amor,
Y esperanza,
Y descubrimiento.
Amigo/a, a veces necesitas llorar,
Balbucear, y gritar,
Y hacer un berrinche,
Y olvidar el futuro y palabras antiguas.
Y volver a regocijarte en una simple respiración,
Y el alegre latido de un corazón sagrado.
Hasta el día de hoy,
No respiras solo/a.
Jeff Foster
28 noviembre 2017
Gracias Dios: eres increíble
Gracias Dios: eres increíble.
Gracias Dios: eres increíble.
Gracias Dios: eres increíble.
Gracias Dios: eres increíble.
Gracias Dios: eres increíble.
Gracias Dios: eres increíble. Creaste aparatos maravillosos que capturan instantes únicos en el universo y que podemos compartir con quienes amamos. Hablo de las fotografías.
Gracias Dios: eres increíble.
Nos diste alas de acero para recorrer el mundo entero, de principio a fin si así lo disponemos y si las condiciones climatológicas lo permiten.
Gracias Dios: eres increíble.
Me trajiste a nacer a un país verde, azul y de ese color que aún no tiene nombre, pues a semejante belleza no se le puede nombrar.
Gracias Dios: eres increíble.
Cada día pintas el cielo diferente y doce horas después, enciendes tu guía de luces danzantes en el firmamento.
Gracias Dios: eres increíble.
Nos diste carreteras y caminos que conectan vidas y destinos.
Gracias Dios: eres increíble.
Creaste la necesidad de nutrirnos y lo haces a través de platillos únicos que aparte, nos permites disfrutar. Guardamos los sabores en nuestra mente como vestigios de la aventura.
Gracias Dios: eres increíble.
Nos rodeaste de agua con sal y sin ella. Abrazarla mientras nos sumergimos es una experiencia irreal y no apta para cardíacos, pues ser abrazada por el agua te mueve el corazón.
Gracias Dios: eres increíble. Creaste aparatos maravillosos que capturan instantes únicos en el universo y que podemos compartir con quienes amamos. Hablo de las fotografías.
Gracias Dios: eres increíble.
Creaste lo creíble y lo increíble y nos permites disfrutarlo, en este caso, a través de un viaje por un extremo de mi país.
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20 noviembre 2017
Viajar nos da respuestas
Viajar siempre nos da respuestas, no siempre las que nos gustan y no siempre a las preguntas que deseamos.
Kintsugi significa “reparar con oro” y es el arte japonés que utiliza una resina mezclada con polvo de oro para reparar cerámica rota, de esa forma la pieza aunque fracturada tiene ahora más valor que antes.
Los viajes para mi son el “Kintsugi” de la vida y pueden repararlo casi todo.
Cada uno de nosotros carga sus propias grietas y cuando unas se reparan se abren otras, a veces muy grandes y dolorosas pero de todo se aprende.
Por eso he decidido navegar por el mundo buscando ese polvo de oro que repare mis fracturas, no seré el mismo pero espero ser más valioso.
Gracias Japón por tus enseñanzas, tus tradiciones y tu generosa hospitalidad, volveré y espero esta vez no tardarme 9 años.
#axm #axmjapon
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19 noviembre 2017
La migración de las mariposas
¿Alguno de ustedes se ha dado cuenta que ya van como 2 semanas que podemos disfrutar en la ciudad el espectáculo natural de la migración de mariposas?... Desconozco si es la mariposa monarca porque todas se ven amarillas, aunque en un acercamiento también me pude dar cuenta que tienen manchitas negras... Desde hace un par de años que por estas fechas soy consciente que nos visitan, sinceramente no me había dado cuenta antes.... pero he podido disfrutar y agradecer su presencia, y el recordatorio que me hacen que a pesar de su aparente fragilidad viajan grandes distancias, son persistentes y muy enfocadas, saben a dónde van, cómo llegar, y cuándo hacerlo, que dejan su vida en este constante viaje, pero que el inicio de todo esto se dió en una maravillosa transformación de oruga a mariposa. Es una lección tan profunda y sutil, es importante transformarnos e iniciar el viaje ligeros y alegres...
¿Qué te dicen a ti estos peculiares visitantes?
¿Alguien sabe el nombre o el tipo de mariposas que son?
Comparto esta hermosa foto que tomó una querida amiga Violeta Nuñez de una serie de fotografías llamada "the world as it is"... gracias por dejarnos ver a través de tus ojos Violeta.
¿Alguien sabe el nombre o el tipo de mariposas que son?
Comparto esta hermosa foto que tomó una querida amiga Violeta Nuñez de una serie de fotografías llamada "the world as it is"... gracias por dejarnos ver a través de tus ojos Violeta.
Edith Reyna
Photo by Violeta Nuñez |
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17 noviembre 2017
Lo que depende de nosotros y la felicidad
El agua sigue su curso sin pretender ser otra cosa que no sea agua. No intenta ser montaña. No intenta ser roca. No se ocupa de ninguna otra cosa que no sea su propia naturaleza. Al ser plena en sí misma, nutre y alimenta a todos los seres.
Nuestra mente constantemente se ocupa de asuntos que no son nuestros, de cosas que no dependen de nosotros. Vivimos bajo la falsa ilusión de que podemos cambiar las mentes ajenas y no podemos cambiar la nuestra propia. Alimentando esa ilusión de falso poder y responsabilidad, nos ocupamos de lo que debería hacer nuestra pareja, de lo que deberían hacer nuestros hijos o hijas, o los profesores, o nuestros padres, o los políticos o, incluso, del tiempo que debería hacer… Siempre creemos que nosotros lo haríamos mejor. Con eso nuestro ego crece, pero también cargamos nuestros hombros de tensión y de peso.
Podemos ser un poco más amables con nosotros mismos y soltar ese peso. No necesitamos llevarlo. Podemos centrarnos en lo que realmente depende de nosotros. Nuestra propia mente, nuestro estado de conciencia.
Dejamos de alimentar la energía negativa de la crítica, y nos ahorramos el tiempo de criticar a pareja, hijos, hijas, profesores, padres, políticos, o el tiempo… Ni siquiera nos criticamos a nosotros.
Cuando aparece la crítica en nuestra mente, simplemente nos preguntaos: “¿Depende eso de mí?” Y si la respuesta es ‘no’, amablemente dejamos ese asunto para quien le corresponda y nos ocupamos de nuestra conciencia.
Si la mente insiste, nos hacemos una segunda pregunta: “¿Sirve de algo este pensamiento? ¿cambia en algo la situación o la persona a la que critico?”, como la respuesta es negativa, dejamos ese pensamiento por inutilidad.
Pero si la mente sigue insistiendo, nos podemos hacer aún otra pregunta: “Ocuparme de ese asunto, que no depende de mí, ¿me hace sentir bien o mal?”, y comprobamos que nos hace sentir mal, así que lo dejamos, porque hemos decidido ser amables con nosotros mismos.
Así poco a poco, vamos dejando los asuntos que no dependen de nosotros, que demuestran ser inútiles y nos traen malestar. Y nos quedamos con las cosas que dependen de nosotros y, al hacerlo, como el agua, llenamos todos los huecos, encontramos nuestro camino, sorteamos las dificultades. Somos nutridos y nutrimos. Somos nosotros mismos y somos una fuente permanente de paz y felicidad.
Nuestra mente constantemente se ocupa de asuntos que no son nuestros, de cosas que no dependen de nosotros. Vivimos bajo la falsa ilusión de que podemos cambiar las mentes ajenas y no podemos cambiar la nuestra propia. Alimentando esa ilusión de falso poder y responsabilidad, nos ocupamos de lo que debería hacer nuestra pareja, de lo que deberían hacer nuestros hijos o hijas, o los profesores, o nuestros padres, o los políticos o, incluso, del tiempo que debería hacer… Siempre creemos que nosotros lo haríamos mejor. Con eso nuestro ego crece, pero también cargamos nuestros hombros de tensión y de peso.
Podemos ser un poco más amables con nosotros mismos y soltar ese peso. No necesitamos llevarlo. Podemos centrarnos en lo que realmente depende de nosotros. Nuestra propia mente, nuestro estado de conciencia.
Dejamos de alimentar la energía negativa de la crítica, y nos ahorramos el tiempo de criticar a pareja, hijos, hijas, profesores, padres, políticos, o el tiempo… Ni siquiera nos criticamos a nosotros.
Cuando aparece la crítica en nuestra mente, simplemente nos preguntaos: “¿Depende eso de mí?” Y si la respuesta es ‘no’, amablemente dejamos ese asunto para quien le corresponda y nos ocupamos de nuestra conciencia.
Si la mente insiste, nos hacemos una segunda pregunta: “¿Sirve de algo este pensamiento? ¿cambia en algo la situación o la persona a la que critico?”, como la respuesta es negativa, dejamos ese pensamiento por inutilidad.
Pero si la mente sigue insistiendo, nos podemos hacer aún otra pregunta: “Ocuparme de ese asunto, que no depende de mí, ¿me hace sentir bien o mal?”, y comprobamos que nos hace sentir mal, así que lo dejamos, porque hemos decidido ser amables con nosotros mismos.
Así poco a poco, vamos dejando los asuntos que no dependen de nosotros, que demuestran ser inútiles y nos traen malestar. Y nos quedamos con las cosas que dependen de nosotros y, al hacerlo, como el agua, llenamos todos los huecos, encontramos nuestro camino, sorteamos las dificultades. Somos nutridos y nutrimos. Somos nosotros mismos y somos una fuente permanente de paz y felicidad.
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02 noviembre 2017
No seas agradable
¡No seas agradable!
Ser agradable es aburrido.
Ser agradable es una farsa.
Ser agradable fue una adaptación diseñada para obtener amor.
No funciona,
Mejor, sé real.
Ser agradable es una máscara
Que cubre tu enojo, tu irritación,
Tu frustración, desilusión,
(energías hermosas que aprendiste de niño para recibir cariño).
¡Ser agradable te sofocará,
Y a cada uno que te rodea.
Ser agradable no permite que los demás
Conozcan como eres en verdad.
¡Asume el riesgo de no ser agradable!
Asume el riesgo de mostrarte como eres.
Prepárate para que haya otros a los que no les caigas bien,
Que crean que eres egoísta, frío, malvado,
O aún peor: un “mundano”.
¡Di lo que quieres decir!
Di sí cuando quieres decir sí.
Di no cuando quieres decir no.
¡Asume el riesgo de cuidarte a ti mismo!
Prepárate para sentirte vivo de nuevo,
Para sentir tu corazón latiendo,
Para sudar. Para temblar.
Para preguntarte si tienes la razón…
Para finalmente sentir tu culpa y vergüenza,
En vez de huir de esos sentimientos.
Prepárate para que tu mundo “agradable” se derrumbe.
Prepárate para perder tu imagen
Lograda con tanto esmero.
¡Prepárate para sentir la adrenalina de lo nuevo!
Jeff Foster
Ser agradable es aburrido.
Ser agradable es una farsa.
Ser agradable fue una adaptación diseñada para obtener amor.
No funciona,
Mejor, sé real.
Ser agradable es una máscara
Que cubre tu enojo, tu irritación,
Tu frustración, desilusión,
(energías hermosas que aprendiste de niño para recibir cariño).
¡Ser agradable te sofocará,
Y a cada uno que te rodea.
Ser agradable no permite que los demás
Conozcan como eres en verdad.
¡Asume el riesgo de no ser agradable!
Asume el riesgo de mostrarte como eres.
Prepárate para que haya otros a los que no les caigas bien,
Que crean que eres egoísta, frío, malvado,
O aún peor: un “mundano”.
¡Di lo que quieres decir!
Di sí cuando quieres decir sí.
Di no cuando quieres decir no.
¡Asume el riesgo de cuidarte a ti mismo!
Prepárate para sentirte vivo de nuevo,
Para sentir tu corazón latiendo,
Para sudar. Para temblar.
Para preguntarte si tienes la razón…
Para finalmente sentir tu culpa y vergüenza,
En vez de huir de esos sentimientos.
Prepárate para que tu mundo “agradable” se derrumbe.
Prepárate para perder tu imagen
Lograda con tanto esmero.
¡Prepárate para sentir la adrenalina de lo nuevo!
Jeff Foster
25 octubre 2017
La perfección no existe
La perfección es el mito más grande que los creativos hemos creado para no hacer nuestro trabajo. Jamás encontrarás la perfección porque no es algo real. Es como perseguir a un arcoíris, o intentar señalar la posición de un electrón.
La perfección no existe porque tu definición de ella está cambiando a cada segundo, por lo que esta no se puede tomar como algo constante. Entre más arte consumas, entre más convivas con gente y con tu medio ambiente, tu definición de lo que es perfecto comenzará a adaptarse a tus nuevos gustos.
Por esta razón jamás debes de buscar la perfección. Porque cuando creas que la has alcanzado, tus gustos habrán evolucionado y la perfección estará en otro lugar tentándote a que sigas perdiendo tu tiempo.
La perfección no existe porque tu definición de ella está cambiando a cada segundo, por lo que esta no se puede tomar como algo constante. Entre más arte consumas, entre más convivas con gente y con tu medio ambiente, tu definición de lo que es perfecto comenzará a adaptarse a tus nuevos gustos.
Por esta razón jamás debes de buscar la perfección. Porque cuando creas que la has alcanzado, tus gustos habrán evolucionado y la perfección estará en otro lugar tentándote a que sigas perdiendo tu tiempo.
Roberto Martínez
23 octubre 2017
Take your trash home (Llévate tu basura)
Este letrero me lo encontré en Kyoto, Japón hace poco.
Tan preciso, tan claro, tan corto, tan directo.
Hay mucho que aprender de la cultura japonesa. Y como ejemplo un pequeño letrero en inglés que nos dice tanto de ellos (no está en japonés como todos sus letreros). Llévate tu basura a casa, no la dejes aquí, no me interesa recibirla.
Grandes ciudades limpias, sin basura en la calle y sin muchos botes de basura, me dice que esto se lo toman muy en serio, y que si tú, extranjero, no tienes la cultura de dejar la basura en su lugar, aquí sí lo debes hacer. Y nadie tira basura, ni los visitantes.
Un país con 136 millones de habitantes, una población mayor a la de México, y con una extensión territorial mucho menor, con una consciencia ecológica (o respeto al medio ambiente) muy clara, que te pide llevarte tu basura y en casa hacer la separación de basura por categorías, y además si tu no cumples con esto, dejan de recoger tu basura, suena bastante simple, y lo es.
Llévate tu basura, además de ser un llamado ecológico, también puede ir más allá... es un llamado a la introspección... ¿qué hay de todos los sentimientos y emociones no resueltos que son basura, y que viajan con nosotros, y que en el momento menos pensado queremos tirar en otro lugar, con otras personas?
Mientras caminamos en esta vida, vamos acumulando muchas cosas, buenas y no tan buenas, y otras cosas que son basura, pero cargamos con ellas, nos acompañan pero también nos pesan, nos quitan energía, la mayoría de las veces sin darnos cuenta.
Muchas veces cuando viajamos, lo hacemos esperando tirar aquello que nos estorba, con lo que no queremos lidiar, de lo que queremos huir, deseamos que el nuevo entorno cambie nuestra realidad, cuando lo que debemos hacer es, analizarlo, separarlo y sacarlo pero en el lugar adecuado y en el momento propicio... ¿Cómo? No soy experta en esto, pero he aprendido que hay que cuestionar, hay que analizar, hay que perdonar, hay que ver si eso que me molesta y estorba necesita una reflexión y terapia profunda, y si no puedo solo, pues reconocerlo y buscar ayuda. Es algo que poco hacemos porque no nos gusta reflexionar, menos cuestionarnos. Pero hacerlo traerá como resultado la oportunidad de ofrecer una mejor versión de nosotros, y dejar un mundo un poco más bello.
Edith Reyna
Tan preciso, tan claro, tan corto, tan directo.
Hay mucho que aprender de la cultura japonesa. Y como ejemplo un pequeño letrero en inglés que nos dice tanto de ellos (no está en japonés como todos sus letreros). Llévate tu basura a casa, no la dejes aquí, no me interesa recibirla.
Grandes ciudades limpias, sin basura en la calle y sin muchos botes de basura, me dice que esto se lo toman muy en serio, y que si tú, extranjero, no tienes la cultura de dejar la basura en su lugar, aquí sí lo debes hacer. Y nadie tira basura, ni los visitantes.
Un país con 136 millones de habitantes, una población mayor a la de México, y con una extensión territorial mucho menor, con una consciencia ecológica (o respeto al medio ambiente) muy clara, que te pide llevarte tu basura y en casa hacer la separación de basura por categorías, y además si tu no cumples con esto, dejan de recoger tu basura, suena bastante simple, y lo es.
Llévate tu basura, además de ser un llamado ecológico, también puede ir más allá... es un llamado a la introspección... ¿qué hay de todos los sentimientos y emociones no resueltos que son basura, y que viajan con nosotros, y que en el momento menos pensado queremos tirar en otro lugar, con otras personas?
Mientras caminamos en esta vida, vamos acumulando muchas cosas, buenas y no tan buenas, y otras cosas que son basura, pero cargamos con ellas, nos acompañan pero también nos pesan, nos quitan energía, la mayoría de las veces sin darnos cuenta.
Muchas veces cuando viajamos, lo hacemos esperando tirar aquello que nos estorba, con lo que no queremos lidiar, de lo que queremos huir, deseamos que el nuevo entorno cambie nuestra realidad, cuando lo que debemos hacer es, analizarlo, separarlo y sacarlo pero en el lugar adecuado y en el momento propicio... ¿Cómo? No soy experta en esto, pero he aprendido que hay que cuestionar, hay que analizar, hay que perdonar, hay que ver si eso que me molesta y estorba necesita una reflexión y terapia profunda, y si no puedo solo, pues reconocerlo y buscar ayuda. Es algo que poco hacemos porque no nos gusta reflexionar, menos cuestionarnos. Pero hacerlo traerá como resultado la oportunidad de ofrecer una mejor versión de nosotros, y dejar un mundo un poco más bello.
Edith Reyna
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16 octubre 2017
El círculo solo tiene un lado
“Cada muerte es un horror, pero si miran una verdadera catástrofe como la de Katrina, y observan lo tremendo – cientos y cientos y cientos de personas que murieron, y se fijan en lo que pasó aquí… una verdadera tormenta que fue solo totalmente asombrosa… nadie ha visto nunca algo como esto. ¿Cuál es el número de muertos que tienen ustedes hasta ahora? ¿Diecisiete? ¡Dieciséis personas certificadas! Dieciséis personas frente a los miles… Dieciséis contra literalmente miles de personas. ¡Ustedes pueden sentirse sumamente orgullosos…!”
- Donald Trump, a funcionarios en Puerto Rico.
***
Dios mío. Esto es como decirles a los padres que se sienten devastados porque acaban de perder a su querido hijo, “cada muerte es un horror, sí, pero, ¿a cuánto asciende el número de seres queridos que USTEDES perdieron hasta este momento? ¿Uno? ¿Uno contra literalmente miles? Su dolor es solo una gota en el océano. Pueden sentirse muy orgullosos de que solo uno de sus hijos haya muerto y del hecho de que no hayan vivido una catástrofe REAL….”
Una completa anulación de lo que siente un corazón desgarrado.
Independientemente de nuestras opiniones o afiliaciones políticas, me parece que todos debemos unirnos ahora para reconocer que aparentemente hay un hombre incapaz de mostrar empatía (y lo digo con mucha compasión, porque yo era así, antes de mi viaje hacia el despertar y la sanación). Un hombre que ha olvidado su verdadera naturaleza espiritual y su poder como la consciencia misma, y que se ha identificado plenamente con su auto-imagen mental, con su ‘pequeño yo’, con su ‘yo’, con ese aspecto mortal que gana o pierde, que toma partido, que busca amor y aprobación y ser especial y teme por encima de todas las cosas su propia ausencia. Aquí está un hombre que no sabe que TODOS somos hermanos y hermanas en la misma consciencia-amor. Sin importar nuestro color, credo, etnia, género, orientación sexual, nacionalidad, religión, raza…
Pero ahora estamos despertando, y cuanto más las aparentes fuerzas de la inconsciencia intentan dividirnos, más nos unimos y recordamos nuestra Unidad original y abrimos nuestros corazones con empatía.
Un feroz poder está creciendo entre nosotros, un poder que sacudirá los cimientos de este mundo, y es un poder más allá de la política.
El amor ganará porque es lo único real, e incluso la muerte no tiene poder sobre él.
Algún día, y permitamos que ese día sea hoy, todos llegaremos a ver – republicanos o demócratas, negros, marrones o blancos, americanos o africanos o japoneses, cristianos o musulmanes o ateos, ricos o pobres, homosexuales, heterosexuales, etc. – que todos estuvimos hechos de lo mismo, que todos fuimos viejos amantes, que todos estuvimos viviendo en el mismo lado del círculo.
Jeff Foster
- Donald Trump, a funcionarios en Puerto Rico.
***
Dios mío. Esto es como decirles a los padres que se sienten devastados porque acaban de perder a su querido hijo, “cada muerte es un horror, sí, pero, ¿a cuánto asciende el número de seres queridos que USTEDES perdieron hasta este momento? ¿Uno? ¿Uno contra literalmente miles? Su dolor es solo una gota en el océano. Pueden sentirse muy orgullosos de que solo uno de sus hijos haya muerto y del hecho de que no hayan vivido una catástrofe REAL….”
Una completa anulación de lo que siente un corazón desgarrado.
Independientemente de nuestras opiniones o afiliaciones políticas, me parece que todos debemos unirnos ahora para reconocer que aparentemente hay un hombre incapaz de mostrar empatía (y lo digo con mucha compasión, porque yo era así, antes de mi viaje hacia el despertar y la sanación). Un hombre que ha olvidado su verdadera naturaleza espiritual y su poder como la consciencia misma, y que se ha identificado plenamente con su auto-imagen mental, con su ‘pequeño yo’, con su ‘yo’, con ese aspecto mortal que gana o pierde, que toma partido, que busca amor y aprobación y ser especial y teme por encima de todas las cosas su propia ausencia. Aquí está un hombre que no sabe que TODOS somos hermanos y hermanas en la misma consciencia-amor. Sin importar nuestro color, credo, etnia, género, orientación sexual, nacionalidad, religión, raza…
Pero ahora estamos despertando, y cuanto más las aparentes fuerzas de la inconsciencia intentan dividirnos, más nos unimos y recordamos nuestra Unidad original y abrimos nuestros corazones con empatía.
Un feroz poder está creciendo entre nosotros, un poder que sacudirá los cimientos de este mundo, y es un poder más allá de la política.
El amor ganará porque es lo único real, e incluso la muerte no tiene poder sobre él.
Algún día, y permitamos que ese día sea hoy, todos llegaremos a ver – republicanos o demócratas, negros, marrones o blancos, americanos o africanos o japoneses, cristianos o musulmanes o ateos, ricos o pobres, homosexuales, heterosexuales, etc. – que todos estuvimos hechos de lo mismo, que todos fuimos viejos amantes, que todos estuvimos viviendo en el mismo lado del círculo.
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10 octubre 2017
El arte de ordenar la casa y la vida
Para empezar, debes deshacerte de lo que no necesitas de una vez por todas y rodéate solo de las cosas que "conmueven" a tu corazón
Para ordenar tu casa, debes dejar de mover tus cosas de un lugar a otro. Necesitas entender qué cosas merecen seguir viviendo en tu casa. Así podrás liberar espacio para las cosas verdaderamente tuyas y crearás tu espacio.
1. Piensa: ¿te da alegría este u otro objeto?
Toma cada objeto en tus manos y pregúntate: "¿Me da alegría?". Guarda solamente los que traigan emociones vívidas y positivas. Rodéate de las cosas que te dan seguridad y fuerza. Esto aplica a todo: desde faldas y suéteres hasta libros y fotografías.
2. Una categoría a la vez
El error de muchas personas es que ordenan una habitación tras otra y siempre se topan con las mismas cosas sin entender cuántas son en total. Mari Kondo aconseja juntar todos los objetos de la misma categoría y luego decidir cuáles de ellos necesitas y cuáles no. Así podrás hacerte una idea del volumen total de las cosas y solo quedarte con lo mejor.
3. Almacenamiento vertical
El principio de almacenamiento inventado por Mari Kondo es el vertical. Si colocas tus pertenencias de esta manera, será imposible que te olvides de ellas. No se pierden bajo montones de otras cosas y son más fáciles de mantener ordenadas. Además, así es como la ropa mantiene su forma mejor y durante más tiempo.
4. Alimentos
Los alimentos básicos se venden en cajas coloridas, latas, frascos o botellas. Todos juntos, estos empaques crean una especie de “ruido informativo“ que ataca a la persona en cuanto entra a la cocina. Si ocultas las etiquetas o viertes los alimentos en recipientes ”limpios“, el “ruido” desaparece. Y tus estantes se verán mucho mejor.
5. Ropa
Lo más importante a la hora de almacenar ropa es ver todo lo que usas en la temporada actual. Para esto te pueden servir el ropero y las perchas. Almacena las prendas del mismo tipo y color juntas para no comprar siempre lo mismo. Es mejor colgar la ropa de tal forma que las cosas largas estén a la izquierda y las cortas, a la derecha. Esto creará la sensación de un guardarropa ligero.
6. Bolsas
Tira la basura de tus bolsas a diario. Así dejarás que "descansen" y de paso te darás cuenta de las cosas que no vas a necesitar a la mañana siguiente. Para que las bolsas mantengan su forma, almacénalas una en otra. Esto también ahorra mucho espacio. Para los documentos que necesitas a diario, haz una caja para tenerlos siempre a mano.
7. Fotos
Una gran cantidad de fotos es otra fuente de contaminación. Para recordar uno u otro momento de tu vida es suficiente imprimir una o dos fotos. Otro consejo es evitar que los retratos acumulen el polvo en las repisas. Deja que te alegren la vista todos los días.
8. Libros
Existen dos categorías de libros de los que deberías deshacerte: aquellos que ya has leído y aquellos que desde hace tiempo piensas leer. Los primeros ya cumplieron su tarea. Y al deshacerte de los últimos, entenderás si quieres regresar a ellos o no. Deja en tu casa solo los mejores libros, dignos del "paseo de la fama".
9. Escritorio
Tu escritorio debe ayudarte a trabajar. Por eso debe estar despejado y, por otro lado, tener todo lo necesario al alcance de la mano. En esta tarea te ayudarán los portapapeles y carpetas. Organizarán espacio de tal forma que hasta se te hará más fácil pensar y expresar tus ideas.
Para ordenar tu casa, debes dejar de mover tus cosas de un lugar a otro. Necesitas entender qué cosas merecen seguir viviendo en tu casa. Así podrás liberar espacio para las cosas verdaderamente tuyas y crearás tu espacio.
1. Piensa: ¿te da alegría este u otro objeto?
Toma cada objeto en tus manos y pregúntate: "¿Me da alegría?". Guarda solamente los que traigan emociones vívidas y positivas. Rodéate de las cosas que te dan seguridad y fuerza. Esto aplica a todo: desde faldas y suéteres hasta libros y fotografías.
2. Una categoría a la vez
El error de muchas personas es que ordenan una habitación tras otra y siempre se topan con las mismas cosas sin entender cuántas son en total. Mari Kondo aconseja juntar todos los objetos de la misma categoría y luego decidir cuáles de ellos necesitas y cuáles no. Así podrás hacerte una idea del volumen total de las cosas y solo quedarte con lo mejor.
3. Almacenamiento vertical
El principio de almacenamiento inventado por Mari Kondo es el vertical. Si colocas tus pertenencias de esta manera, será imposible que te olvides de ellas. No se pierden bajo montones de otras cosas y son más fáciles de mantener ordenadas. Además, así es como la ropa mantiene su forma mejor y durante más tiempo.
4. Alimentos
Los alimentos básicos se venden en cajas coloridas, latas, frascos o botellas. Todos juntos, estos empaques crean una especie de “ruido informativo“ que ataca a la persona en cuanto entra a la cocina. Si ocultas las etiquetas o viertes los alimentos en recipientes ”limpios“, el “ruido” desaparece. Y tus estantes se verán mucho mejor.
5. Ropa
Lo más importante a la hora de almacenar ropa es ver todo lo que usas en la temporada actual. Para esto te pueden servir el ropero y las perchas. Almacena las prendas del mismo tipo y color juntas para no comprar siempre lo mismo. Es mejor colgar la ropa de tal forma que las cosas largas estén a la izquierda y las cortas, a la derecha. Esto creará la sensación de un guardarropa ligero.
6. Bolsas
Tira la basura de tus bolsas a diario. Así dejarás que "descansen" y de paso te darás cuenta de las cosas que no vas a necesitar a la mañana siguiente. Para que las bolsas mantengan su forma, almacénalas una en otra. Esto también ahorra mucho espacio. Para los documentos que necesitas a diario, haz una caja para tenerlos siempre a mano.
7. Fotos
Una gran cantidad de fotos es otra fuente de contaminación. Para recordar uno u otro momento de tu vida es suficiente imprimir una o dos fotos. Otro consejo es evitar que los retratos acumulen el polvo en las repisas. Deja que te alegren la vista todos los días.
8. Libros
Existen dos categorías de libros de los que deberías deshacerte: aquellos que ya has leído y aquellos que desde hace tiempo piensas leer. Los primeros ya cumplieron su tarea. Y al deshacerte de los últimos, entenderás si quieres regresar a ellos o no. Deja en tu casa solo los mejores libros, dignos del "paseo de la fama".
9. Escritorio
Tu escritorio debe ayudarte a trabajar. Por eso debe estar despejado y, por otro lado, tener todo lo necesario al alcance de la mano. En esta tarea te ayudarán los portapapeles y carpetas. Organizarán espacio de tal forma que hasta se te hará más fácil pensar y expresar tus ideas.
Marie Kondo
(El poder mágico de la limpieza)
09 octubre 2017
Viajar ligero
Conocí a Chris y Sarah recientemente en Japón, esa mañana de domingo platicamos un buen rato mientras yo intentaba prepararme un café en casa de Luis, tanto ellos como yo eramos huéspedes ahí.
Realmente fue poco el tiempo o así me lo pareció. Intercambiamos algunas historias, la suya que a mi me impactó, pues estaban viajando por el mundo, habían dejado todo para hacerlo y no tenían intención de volver a su rutina anterior (de trabajo, rutina, consumismo, etc.) En la plática comentaron algo que me dejó pensando hasta el día de hoy: "todas nuestras pertenencias están en estas maletas (2 maletas backpack grandes), no tenemos nada más" y Sarah agregó "y creo que me desharé de algunas cosas, porque pesa mucho".
Su travesía había empezado un mes y medio atrás, ya tenían un mes en Japón y aún les faltaba más tiempo, "no alcanzas a conocer todo" comentaron. Esa mañana salí tarde a pasear aunque, creo que valió la pena mi tiempo invertido conociéndolos, además fue un día lluvioso. En la noche los volví a ver, platicamos algunas cosas, y al siguiente día yo me fui a Kyoto.
Mi sorpresa fue que a mi regreso (3 días después) Sarah me recibió con un cálido y largo abrazo, me dijo "Edith, que bueno que te volvemos a ver", platicamos y no nos despedimos, los invité a cenar pero había otros planes para ese día, y yo ya no estaría el siguiente día.
Así que no creo volver a verlos, son una hermosa pareja, agradables, platicadores, respetuosos, amorosos que están viviendo al máximo mientras conocen el mundo, pero los recordaré siempre, porque estas cosas son las que realmente vale la pena experimentar.
Desde ese día he estado pensando mucho en lo que aprendí de ellos, porque a pesar de querer viajar ligera, terminé a mi regreso con 4 maletas, mi backpack y una bolsa. Pensé mucho en eso que dijo Sarah... sobre todo cuando tuve que cargar cada maleta, me decía: "¿es realmente necesario todo esto?"
Si pudiéramos hacer un ejercicio de poner en una maleta nuestras pertenencias más valiosas y realmente necesarias para el camino, y cargarlas por un día o incluso unas horas, yo creo que nos empezaríamos a preguntar si realmente es necesario lo que cargamos, tal vez en poco tiempo estaríamos cansados y adoloridos por el peso y sacaríamos aquello que tanto pesa y no es importante para nuestro camino.
Muchas veces he intentado deshacerme de muchas cosas innecesarias, y yo creo que el cargarlas en la espalda es un buen ejercicio, porque debes tomar decisiones sobre qué se queda y qué se va.
Creo definitivamente que esto aplica también a sentimientos, pensamientos y emociones que cargamos y no son necesarias, que nos agotan, que nos quitan la energía, la alegría, y nos ponen de mal humor.
Chris & Sarah son unos viajeros con los que coincidí en tiempo y espacio, pero que dejaron algo en mi, sin saberlo, me gustaría mucho que también yo pudiera dejar algo así en la gente que pasa por mi camino, tal vez algún día pueda dejar algo significativo en ti, o en cualquier otro viajero que se cruce en mi camino. Mientras tanto, cada día, camino agradeciendo las hermosas coincidencias que Dios pone en este caminar llamado vida.
Gracias, Gracias, Gracias
Edith Reyna
P.D. No hubo tiempo de tomarles fotos a Chris & Sarah, aunque era mi intención.
Realmente fue poco el tiempo o así me lo pareció. Intercambiamos algunas historias, la suya que a mi me impactó, pues estaban viajando por el mundo, habían dejado todo para hacerlo y no tenían intención de volver a su rutina anterior (de trabajo, rutina, consumismo, etc.) En la plática comentaron algo que me dejó pensando hasta el día de hoy: "todas nuestras pertenencias están en estas maletas (2 maletas backpack grandes), no tenemos nada más" y Sarah agregó "y creo que me desharé de algunas cosas, porque pesa mucho".
Su travesía había empezado un mes y medio atrás, ya tenían un mes en Japón y aún les faltaba más tiempo, "no alcanzas a conocer todo" comentaron. Esa mañana salí tarde a pasear aunque, creo que valió la pena mi tiempo invertido conociéndolos, además fue un día lluvioso. En la noche los volví a ver, platicamos algunas cosas, y al siguiente día yo me fui a Kyoto.
Mi sorpresa fue que a mi regreso (3 días después) Sarah me recibió con un cálido y largo abrazo, me dijo "Edith, que bueno que te volvemos a ver", platicamos y no nos despedimos, los invité a cenar pero había otros planes para ese día, y yo ya no estaría el siguiente día.
Así que no creo volver a verlos, son una hermosa pareja, agradables, platicadores, respetuosos, amorosos que están viviendo al máximo mientras conocen el mundo, pero los recordaré siempre, porque estas cosas son las que realmente vale la pena experimentar.
Desde ese día he estado pensando mucho en lo que aprendí de ellos, porque a pesar de querer viajar ligera, terminé a mi regreso con 4 maletas, mi backpack y una bolsa. Pensé mucho en eso que dijo Sarah... sobre todo cuando tuve que cargar cada maleta, me decía: "¿es realmente necesario todo esto?"
Si pudiéramos hacer un ejercicio de poner en una maleta nuestras pertenencias más valiosas y realmente necesarias para el camino, y cargarlas por un día o incluso unas horas, yo creo que nos empezaríamos a preguntar si realmente es necesario lo que cargamos, tal vez en poco tiempo estaríamos cansados y adoloridos por el peso y sacaríamos aquello que tanto pesa y no es importante para nuestro camino.
Muchas veces he intentado deshacerme de muchas cosas innecesarias, y yo creo que el cargarlas en la espalda es un buen ejercicio, porque debes tomar decisiones sobre qué se queda y qué se va.
Creo definitivamente que esto aplica también a sentimientos, pensamientos y emociones que cargamos y no son necesarias, que nos agotan, que nos quitan la energía, la alegría, y nos ponen de mal humor.
Chris & Sarah son unos viajeros con los que coincidí en tiempo y espacio, pero que dejaron algo en mi, sin saberlo, me gustaría mucho que también yo pudiera dejar algo así en la gente que pasa por mi camino, tal vez algún día pueda dejar algo significativo en ti, o en cualquier otro viajero que se cruce en mi camino. Mientras tanto, cada día, camino agradeciendo las hermosas coincidencias que Dios pone en este caminar llamado vida.
Gracias, Gracias, Gracias
Edith Reyna
P.D. No hubo tiempo de tomarles fotos a Chris & Sarah, aunque era mi intención.
06 octubre 2017
Estar abierto a todo
Cuando alquien busca – dijo Siddhartha -,
suele ocurrir fácilmente que sus ojos sólo ven la cosa que anda buscando;
este alquien no puede encontrar nada,
no deja entrar nada dentro de él,
porque siempre está pensando en la cosa buscada,
porque tiene un fin,
porque está poseído por este fin.
Buscar significa tener un fin.
Pero encontrar quiere decir ser libre,
estar abierto a todo,
no tener fin.
Hermann Hesse
suele ocurrir fácilmente que sus ojos sólo ven la cosa que anda buscando;
este alquien no puede encontrar nada,
no deja entrar nada dentro de él,
porque siempre está pensando en la cosa buscada,
porque tiene un fin,
porque está poseído por este fin.
Buscar significa tener un fin.
Pero encontrar quiere decir ser libre,
estar abierto a todo,
no tener fin.
Hermann Hesse
(Siddhartha)
05 octubre 2017
Fuerza México
México desquebrajado
Cuarteado
Retembló en sus centros la tierra
y nos zarandeó, nos azotó, nos pisoteó.
México es un animal dormido
muy resistente y con el sueño pesado
pero que cuando se le necesita
despierta con los ojos muy abiertos
y las orejas hacia atrás.
Salimos huyendo de los edificios
y como un río la gente por la calle corre.
Puede suponerse que se debe correr del peligro
pero estamos despertando
corremos hacia él.
Hacia el peligro
hacia el amor
hacia la solidaridad ciega que lo ofrece todo
que lo arriesga todo.
Nos ponemos de pie
nos espabilamos con el estruendo del concreto que se rompe
aullamos de dolor
mucho dolor
para llamar a la jauría
para convocar el valor.
Acudimos diez
y cien
y mil
y diez mil
y cien mil.
Cada quien va ocupando su lugar
se va ofreciendo lo que se sabe
lo que se tiene.
Algunos tienen brazos
otros tienen palas
unos tienen frijolitos
otros saben hablar por teléfono
unos saben arriesgar la vida bajo los escombros
otros saben curar heridas
unos saben dónde hay polines y cobijas
otros tienen una camioneta
unos saben consolar
otros saben mandar
unos saben andar en motocicleta
otros saben revisar las grietas
unos tienen el olfato perfecto
otros saben escuchar la vida.
Y a la calle
todos a la calle a buscar preservar la vida
generosos, incansables, infinitamente valientes
con un propósito indescriptible pero innegable.
México despierto tiene pundonor.
Somos un pueblo de guerreros águila con guantes de carnaza
guerreros tigre de la piedad.
Qué hermosos
qué dignos.
Tenemos amigos que han venido
vienen a luchar a nuestro lado.
Y es que qué hondo cala la pérdida
pero qué hondo conmueve ver a este México de ojos abiertos.
Qué dolor encontrar sólo muerte
qué milagro encontrar algo de vida.
México despierto es magnífico
hecho de propósito
hecho de gente valiente y generosa.
Despiertos no hay color ni clase
todo el arcoíris de nuestra realidad lo atraviesa la aguja del dolor
y nos cose juntos en una sola cosa bella
Gracias por esta lección de vida de cara a la muerte.
Gracias por esta lección de humildad y de honor.
Gracias por esta esperanza y ejemplo.
Entre el lodo del dolor y la pérdida
de la confusión y el miedo
México se puso de pie
y hombro con hombro
supimos que podemos superarlo todo.
#FuerzaMéxico
Texto y narración:
Rodrigo Garciarroyo, Psiquepol
Cuarteado
Retembló en sus centros la tierra
y nos zarandeó, nos azotó, nos pisoteó.
México es un animal dormido
muy resistente y con el sueño pesado
pero que cuando se le necesita
despierta con los ojos muy abiertos
y las orejas hacia atrás.
Salimos huyendo de los edificios
y como un río la gente por la calle corre.
Puede suponerse que se debe correr del peligro
pero estamos despertando
corremos hacia él.
Hacia el peligro
hacia el amor
hacia la solidaridad ciega que lo ofrece todo
que lo arriesga todo.
Nos ponemos de pie
nos espabilamos con el estruendo del concreto que se rompe
aullamos de dolor
mucho dolor
para llamar a la jauría
para convocar el valor.
Acudimos diez
y cien
y mil
y diez mil
y cien mil.
Cada quien va ocupando su lugar
se va ofreciendo lo que se sabe
lo que se tiene.
Algunos tienen brazos
otros tienen palas
unos tienen frijolitos
otros saben hablar por teléfono
unos saben arriesgar la vida bajo los escombros
otros saben curar heridas
unos saben dónde hay polines y cobijas
otros tienen una camioneta
unos saben consolar
otros saben mandar
unos saben andar en motocicleta
otros saben revisar las grietas
unos tienen el olfato perfecto
otros saben escuchar la vida.
Y a la calle
todos a la calle a buscar preservar la vida
generosos, incansables, infinitamente valientes
con un propósito indescriptible pero innegable.
México despierto tiene pundonor.
Somos un pueblo de guerreros águila con guantes de carnaza
guerreros tigre de la piedad.
Qué hermosos
qué dignos.
Tenemos amigos que han venido
vienen a luchar a nuestro lado.
Y es que qué hondo cala la pérdida
pero qué hondo conmueve ver a este México de ojos abiertos.
Qué dolor encontrar sólo muerte
qué milagro encontrar algo de vida.
México despierto es magnífico
hecho de propósito
hecho de gente valiente y generosa.
Despiertos no hay color ni clase
todo el arcoíris de nuestra realidad lo atraviesa la aguja del dolor
y nos cose juntos en una sola cosa bella
Gracias por esta lección de vida de cara a la muerte.
Gracias por esta lección de humildad y de honor.
Gracias por esta esperanza y ejemplo.
Entre el lodo del dolor y la pérdida
de la confusión y el miedo
México se puso de pie
y hombro con hombro
supimos que podemos superarlo todo.
#FuerzaMéxico
Texto y narración:
Rodrigo Garciarroyo, Psiquepol
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solidaridad,
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03 octubre 2017
La vida es corta o demasiado larga
No sé… si la vida es corta
o demasiado larga para nosotros.
Mas sé que nada de lo que vivimos
tiene sentido, si no tocamos el corazón
de las personas.
Muchas veces basta ser:
regazo que acoge,
brazo que envuelve,
palabra que conforta,
silencio que respeta,
alegría que contagia,
lágrima que corre,
mirada que acaricia,
deseo que sacia,
amor que motiva.
Y eso no es cosa de otro mundo,
es lo que da sentido a la vida,
es lo que hace que ella
no sea ni corta, ni demasiado larga,
sino que sea intensa,
verdadera, pura…. mientras dure.
Cora Coralina
30 septiembre 2017
La manchita negra en la hoja blanca
Muchas veces escuché la analogía de la pared blanca con la manchita negra... ¿Eres de los que aprovechan el blanco de la pared para tomar fuerza y solucionar la manchita negra o de los que se agarra de la manchita negra para excusarse de la responsabilidad de vivir?
Hablemos de super héroes...
En la fiesta del día del niño del hospital conocí a Karla, una adolescente de 16 años que estaba en procedimientos de hemodiálisis, sentada en su silla de ruedas acomodada del lado de los adultos, le pregunté si se quería acercar y me dijo que sí... sonriendo con los payasos después cuando vio que estábamos entregando los juguetes me pidió uno ... para ella ...
No sé cuánto tiempo lleva viviendo esas circunstancias, pero sí más de dos años.
Después de ahí, cada vez que la veíamos, que por cierto es muy seguido, siempre nos habla de sus planes, de lo que le gustaría hacer, de su familia, de todas las cosas buenas que tiene, habla de estudiar, de trabajar para sacar adelante a su familia, habla de pasear, de conocer gente nueva, habla de lo mucho que quiere a sus hermanos..., esta última vez que la vimos nos platicó que se le llenaron los pulmones de agua, pero aún así, con su peculiar sonrisa, nos dijo que ya quería que se la sacaran porque tenía muchas cosas pendientes por hacer...
Un día me platicó que mucha gente le decía que tenía mucha vida por delante, que estaba muy jóven y ella les contesta que no tenía mucha vida por delante, que tenía mucha vida hoy, y eso por el momento es suficiente...
¿Por qué les publico esto? Karla puede quejarse de miles de cosas que suceden en su vida, su mamá es sordomuda, vive en condiciones precarias o de pobreza, su enfermedad, necesidades, tanto tiempo en el hospital, su condición es cada vez más delicada, etc... Pero prefiere agarrarse de las millones de cosas buenas que tiene para fortalecer su fe y esperanza de que lo mejor está por venir... es uno de mis super héroes. Casi no menciona la palabra Dios, pero sus platicas siempre están llenas de Él, su fe y su esperanza... Y alimenta mi teoría de que la fe más que platicarla hay que practicarla.
Sé que leerás esto puesto que ya vi que nos sigues, y acepta este pequeño homenaje al gran ejemplo que siempre nos das.
Dios nos bendice, así que dejemos de perder tanto tiempo en lamentaciones y aprovechémoslo para vivir!!!
Más sonrisas y menos quejas
Los quiero mucho a todos, a todos!!
Héctor Molina
PD. Sigan orando por nosotros, por todos, cada oración llega, cada buena vibra se siente, ha sido pesado el camino pero vamos mejor.
12 septiembre 2017
La fotografía
En la ocasión de la publicación de mi primer libro de fotos, Viaje a la Iluminación (ahora reimpreso como El Espíritu del Tíbet, Aperture, Nueva York), Henri Cartier-Bresson me envió muy amablemente esta nota.
"La cámara de Matthieu y su vida espiritual son una, y desde esta primavera estas imágenes fugaces y eternas". Henri-Cartier Bresson 12 de noviembre de 1995
Para mí, la fotografía es un himno a la belleza. Comencé a fotografiar cuando tenía quince años, con mi amigo André Fatras, un fotógrafo de animales, aventurero y amante de la naturaleza.
En 1967, viajé a Darjeeling en India para conocer a mi primer maestro espiritual. Después de su muerte en 1975, pasé doce años con Dilgo Khyentse Rinpoche, quien era el arquetipo del maestro espiritual, y viajé con él a Bhután, India, Nepal y Tíbet. A lo largo de los años, he tomado fotografías de mis maestros y del mundo que los rodea. Mi principal aspiración era compartir la increíble belleza, fuerza y profundidad de su mundo. He fotografiado principalmente en Bhután, India, Tíbet, Nepal y Tailandia.
Según las enseñanzas budistas, la naturaleza búdica está presente en todo ser viviente y el estado natural de la mente, cuando no es mal interpretado por el poder de los pensamientos negativos, es la perfección. Se cree que las cualidades positivas, como un buen corazón, reflejan el verdadero y básico tejido de los seres humanos. En fotografía, mi esperanza es mostrar la belleza de la naturaleza humana.
Incluso durante un sufrimiento intenso puede haber dignidad y belleza, incluso ante la destrucción y la persecución puede haber esperanza. Esto es particularmente cierto para el Tíbet y su gente, quienes han logrado retener su alegría, fortaleza interior y confianza mientras están siendo sometidos a un genocidio humano y cultural. Para mí, es esencial inspirar esperanza y confianza, ya que es lo que más nos falta y más necesitamos. Quizás no haga una fotografía en meses. Luego viene el día en que la gente, los lugares y la luz surgen de una manera tan hermosa que no puedo resistir hacer una imagen de ella con el deseo de compartirla con los demás.
He intentado abrir una puerta a un mundo antiguo y a la vez relevante en nuestros tiempos; y proporcionar una visión desde el interior de la vida de un maestro budista tibetano y una cultura única que, a pesar de los trastornos en su patria, todavía sobrevive en toda su autenticidad.
Extractos de una entrevista con el Sunday Telegraph
ST: Lo que me llama la atención – la atención todos, estoy seguro - es la profundidad de alegría y felicidad grabada en las caras de estas fotografías. Me pregunto si tiene alguna idea acerca de cómo esto refleja su práctica y creencias budistas.
MR: De hecho, el principal poder de inspiración de los retratos es que estos maestros, ermitaños y yoguis son ejemplos vivientes de lo que enseñan. El mensajero se ha convertido en el mensaje. Lo que muestran exteriormente es lo que son por dentro, sin contradicciones. El hecho de que percibamos esto es reconfortante e inspirador. El contentamiento y la felicidad reflejados en sus caras expresan un profundo sentido de serenidad y satisfacción que surge de una mente excepcionalmente saludable.
ST: Y también acerca de la relación entre la naturaleza y la espiritualidad - ¿es posible sentir algo distinto a lo espiritual cuando se enfrenta a la imponente belleza natural representada en estas imágenes?
MR: Es sin duda una experiencia increíble estar en muchos de esos lugares en el Tíbet. La intensa profundidad del silencio, la inmensidad del paisaje, el azul profundo del cielo, el aire crujiente ... es tal que cuando uno simplemente se sienta allí, siente que nunca quiere irse, sino permanecer en esa profunda y limpia armonía entre el medio ambiente y su propia mente serena. Es incluso una experiencia más sorprendente estar en presencia de seres cuyos corazones están completamente llenos de altruismo y sabiduría, y tratar de fusionar tu mente con las suyas.
Por lo tanto, los paisajes y los retratos pueden conducirte de una comprensión de la belleza exterior a la de la belleza interior del despertar espiritual y las cualidades humanas ilimitadas que acompañan ese despertar, como el calor y la luz de los rayos que acompañan naturalmente al sol.
"La cámara de Matthieu y su vida espiritual son una, y desde esta primavera estas imágenes fugaces y eternas". Henri-Cartier Bresson 12 de noviembre de 1995
Para mí, la fotografía es un himno a la belleza. Comencé a fotografiar cuando tenía quince años, con mi amigo André Fatras, un fotógrafo de animales, aventurero y amante de la naturaleza.
En 1967, viajé a Darjeeling en India para conocer a mi primer maestro espiritual. Después de su muerte en 1975, pasé doce años con Dilgo Khyentse Rinpoche, quien era el arquetipo del maestro espiritual, y viajé con él a Bhután, India, Nepal y Tíbet. A lo largo de los años, he tomado fotografías de mis maestros y del mundo que los rodea. Mi principal aspiración era compartir la increíble belleza, fuerza y profundidad de su mundo. He fotografiado principalmente en Bhután, India, Tíbet, Nepal y Tailandia.
Según las enseñanzas budistas, la naturaleza búdica está presente en todo ser viviente y el estado natural de la mente, cuando no es mal interpretado por el poder de los pensamientos negativos, es la perfección. Se cree que las cualidades positivas, como un buen corazón, reflejan el verdadero y básico tejido de los seres humanos. En fotografía, mi esperanza es mostrar la belleza de la naturaleza humana.
Incluso durante un sufrimiento intenso puede haber dignidad y belleza, incluso ante la destrucción y la persecución puede haber esperanza. Esto es particularmente cierto para el Tíbet y su gente, quienes han logrado retener su alegría, fortaleza interior y confianza mientras están siendo sometidos a un genocidio humano y cultural. Para mí, es esencial inspirar esperanza y confianza, ya que es lo que más nos falta y más necesitamos. Quizás no haga una fotografía en meses. Luego viene el día en que la gente, los lugares y la luz surgen de una manera tan hermosa que no puedo resistir hacer una imagen de ella con el deseo de compartirla con los demás.
He intentado abrir una puerta a un mundo antiguo y a la vez relevante en nuestros tiempos; y proporcionar una visión desde el interior de la vida de un maestro budista tibetano y una cultura única que, a pesar de los trastornos en su patria, todavía sobrevive en toda su autenticidad.
Extractos de una entrevista con el Sunday Telegraph
ST: Lo que me llama la atención – la atención todos, estoy seguro - es la profundidad de alegría y felicidad grabada en las caras de estas fotografías. Me pregunto si tiene alguna idea acerca de cómo esto refleja su práctica y creencias budistas.
MR: De hecho, el principal poder de inspiración de los retratos es que estos maestros, ermitaños y yoguis son ejemplos vivientes de lo que enseñan. El mensajero se ha convertido en el mensaje. Lo que muestran exteriormente es lo que son por dentro, sin contradicciones. El hecho de que percibamos esto es reconfortante e inspirador. El contentamiento y la felicidad reflejados en sus caras expresan un profundo sentido de serenidad y satisfacción que surge de una mente excepcionalmente saludable.
ST: Y también acerca de la relación entre la naturaleza y la espiritualidad - ¿es posible sentir algo distinto a lo espiritual cuando se enfrenta a la imponente belleza natural representada en estas imágenes?
MR: Es sin duda una experiencia increíble estar en muchos de esos lugares en el Tíbet. La intensa profundidad del silencio, la inmensidad del paisaje, el azul profundo del cielo, el aire crujiente ... es tal que cuando uno simplemente se sienta allí, siente que nunca quiere irse, sino permanecer en esa profunda y limpia armonía entre el medio ambiente y su propia mente serena. Es incluso una experiencia más sorprendente estar en presencia de seres cuyos corazones están completamente llenos de altruismo y sabiduría, y tratar de fusionar tu mente con las suyas.
Por lo tanto, los paisajes y los retratos pueden conducirte de una comprensión de la belleza exterior a la de la belleza interior del despertar espiritual y las cualidades humanas ilimitadas que acompañan ese despertar, como el calor y la luz de los rayos que acompañan naturalmente al sol.
Matthieu Ricard
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11 septiembre 2017
La ley del camión de la basura
¿Con qué frecuencia permites que las majaderías de otras personas cambien tu estado de ánimo? ¿Te das permiso de enojarte cuando otro conductor te agrede por un error de tránsito, o un mesero grosero te trata irrespetuosamente, un jefe exigente te pide más de lo que te corresponde hacer o cuando un compañero de trabajo arruina tu día?
Lo que realmente distingue a una persona saludable y exitosa es, el control que tenga sobre el manejo de la ira. Hace 33 años aprendí esta lección. Me la enseñaron en el asiento trasero de un taxi en Nueva York.
Me subí a un taxi y partimos rumbo a la dirección que le indiqué al conductor, íbamos en el carril derecho cuando de repente un coche salió de no sé dónde; el taxista frenó súbitamente, se oyó el rechinar de las llantas y a escasos centímetros evitó chocar con el otro auto. El conductor del coche que casi causa el accidente, empezó a gritarnos con una serie de malas palabras altisonantes.
El taxista, solo sonrió y le saludó amable. Así que, yo sorprendido le pregunte, -“¿Por qué hace eso?” "Ese tipo, por muy poco destruye su taxi y nos manda directito al hospital," agregué.
Entonces el taxista me dio la lección más bella de mi vida, la que ahora yo llamo “La Ley del Camión de Basura.”
Muchas personas, me dijo:
-“son como un camión de basura. Están llenos de enojo, frustración y desaliento. Una vez que han acumulado mucha basura, necesitan un lugar en donde tirarla y si uno se lo permite, te la echan a ti.”
Esa fue la lección del Camión de Basura. Empecé a reflexionar, “¿Cada cuánto yo permito que los camiones de basura me contaminen?” y, “¿Con qué frecuencia tomó mi basura y la tiró sobre las personas que más amo como: mi esposa, mis hijos o mis amigos?”
Aquel día me propuse; “A no ser el basurero de nadie.” Empecé a ver con más claridad los camiones de basura y decidí a partir de ese día no dejarme arrojar su porquería. En mi área de servicio no puedo evitar que personas "llenas de basura emocional, espiritual y mental" me busquen.
Pero, si puedo decidir saludablemente escucharlas entendiendo que no soy una figura paterna sustituta o codependiente. Verán podemos dar consejería, mentoría y hasta coaching a personas que realmente lo necesitan, pero no debemos mantener una relación indefinidamente con personas que no quieren cambiar, sino que solo echan su basura en uno. Eso es tóxico. Permanecer siendo parte de ello te vuelve codependiente.
Tal vez no aplique a usted pero tengo dos sencillas metodologías para evitar convertirme en el basurero de otros, aun cuando amo servir, enseñar y mentorear a pastores y líderes.
1. "3 strikes and out" - viene del beisbol y consiste en atender a una persona hasta tres veces con el mismo error, fracaso o problema. Si al tercer encuentro no hay decisiones que empiecen a transformar sus vidas mediante disciplinas físicas, espirituales y mentales, un sincero compromiso de cambiar, no lo atiendo más.
2. "no paternalismo, no codependencia" - No soy el papá de nadie, excepto de mis hijos, ni debo convertirme en mártir o sacrificio de otras personas. Existe una confusión entre el cristianismo y la codependencia. Dios quiere que yo viva Sus propósitos para Su gloria, entendiendo que El quiere que sea saludable para entonces poder ayudar a otros. El quiere que yo actúe, no que reaccione. El quiere que sirva no que me vuelva un adicto al servicio. El que quiere que sirva voluntariamente no por obligación o por temor.
No he vuelto a permitir que los camiones de basura tomen el control de mis sentimientos y mucho menos de mis emociones. No podemos ayudar a otros si nosotros mismos estamos desbalanceados y llenos de basura sin procesar. Un último consejo practico: si usted quiere ser sensible a las personas tipo "camiones de basura" asegurese de tener al menos dos relaciones saludables por cada una enferma o disfuncional que atienda.
En el fondo se trata de hacer "judo". No dejar que drenen nuestra energía y enfoque, sino por ejemplo, sonreírles a los insatisfechos, malhumorados y frustrados como la mejor medicina que puede ayudarles a cambiar su perspectiva de la vida o por lo menos les puede iluminar su día.
"El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo que es bueno; y el hombre malo, del mal tesoro saca lo que es malo; porque de la abundancia del corazón habla su boca!". Lucas 6:45
Puede que tras leer la presente te encuentres con alguien "lleno de basura", no lo vea como una amenaza, sino como una oportunidad para crecer, para ser saludable, para aprender a manejar los recursos que Dios le ha dado con inteligencia y sabiduría. Usted debe protegerse, buscando el balance en sus relaciones, pero puede ayudar a estas personas mostrando consistentemente otra perspectiva a su espíritu autodestructivo originado en su desesperación e ignorancia. Podemos ser sal, podemos ser luz, pero necesitamos estar sanos.
Juan Carlos Flores Zúñiga
Lo que realmente distingue a una persona saludable y exitosa es, el control que tenga sobre el manejo de la ira. Hace 33 años aprendí esta lección. Me la enseñaron en el asiento trasero de un taxi en Nueva York.
Me subí a un taxi y partimos rumbo a la dirección que le indiqué al conductor, íbamos en el carril derecho cuando de repente un coche salió de no sé dónde; el taxista frenó súbitamente, se oyó el rechinar de las llantas y a escasos centímetros evitó chocar con el otro auto. El conductor del coche que casi causa el accidente, empezó a gritarnos con una serie de malas palabras altisonantes.
El taxista, solo sonrió y le saludó amable. Así que, yo sorprendido le pregunte, -“¿Por qué hace eso?” "Ese tipo, por muy poco destruye su taxi y nos manda directito al hospital," agregué.
Entonces el taxista me dio la lección más bella de mi vida, la que ahora yo llamo “La Ley del Camión de Basura.”
Muchas personas, me dijo:
-“son como un camión de basura. Están llenos de enojo, frustración y desaliento. Una vez que han acumulado mucha basura, necesitan un lugar en donde tirarla y si uno se lo permite, te la echan a ti.”
Esa fue la lección del Camión de Basura. Empecé a reflexionar, “¿Cada cuánto yo permito que los camiones de basura me contaminen?” y, “¿Con qué frecuencia tomó mi basura y la tiró sobre las personas que más amo como: mi esposa, mis hijos o mis amigos?”
Aquel día me propuse; “A no ser el basurero de nadie.” Empecé a ver con más claridad los camiones de basura y decidí a partir de ese día no dejarme arrojar su porquería. En mi área de servicio no puedo evitar que personas "llenas de basura emocional, espiritual y mental" me busquen.
Pero, si puedo decidir saludablemente escucharlas entendiendo que no soy una figura paterna sustituta o codependiente. Verán podemos dar consejería, mentoría y hasta coaching a personas que realmente lo necesitan, pero no debemos mantener una relación indefinidamente con personas que no quieren cambiar, sino que solo echan su basura en uno. Eso es tóxico. Permanecer siendo parte de ello te vuelve codependiente.
Tal vez no aplique a usted pero tengo dos sencillas metodologías para evitar convertirme en el basurero de otros, aun cuando amo servir, enseñar y mentorear a pastores y líderes.
1. "3 strikes and out" - viene del beisbol y consiste en atender a una persona hasta tres veces con el mismo error, fracaso o problema. Si al tercer encuentro no hay decisiones que empiecen a transformar sus vidas mediante disciplinas físicas, espirituales y mentales, un sincero compromiso de cambiar, no lo atiendo más.
2. "no paternalismo, no codependencia" - No soy el papá de nadie, excepto de mis hijos, ni debo convertirme en mártir o sacrificio de otras personas. Existe una confusión entre el cristianismo y la codependencia. Dios quiere que yo viva Sus propósitos para Su gloria, entendiendo que El quiere que sea saludable para entonces poder ayudar a otros. El quiere que yo actúe, no que reaccione. El quiere que sirva no que me vuelva un adicto al servicio. El que quiere que sirva voluntariamente no por obligación o por temor.
No he vuelto a permitir que los camiones de basura tomen el control de mis sentimientos y mucho menos de mis emociones. No podemos ayudar a otros si nosotros mismos estamos desbalanceados y llenos de basura sin procesar. Un último consejo practico: si usted quiere ser sensible a las personas tipo "camiones de basura" asegurese de tener al menos dos relaciones saludables por cada una enferma o disfuncional que atienda.
En el fondo se trata de hacer "judo". No dejar que drenen nuestra energía y enfoque, sino por ejemplo, sonreírles a los insatisfechos, malhumorados y frustrados como la mejor medicina que puede ayudarles a cambiar su perspectiva de la vida o por lo menos les puede iluminar su día.
"El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo que es bueno; y el hombre malo, del mal tesoro saca lo que es malo; porque de la abundancia del corazón habla su boca!". Lucas 6:45
Puede que tras leer la presente te encuentres con alguien "lleno de basura", no lo vea como una amenaza, sino como una oportunidad para crecer, para ser saludable, para aprender a manejar los recursos que Dios le ha dado con inteligencia y sabiduría. Usted debe protegerse, buscando el balance en sus relaciones, pero puede ayudar a estas personas mostrando consistentemente otra perspectiva a su espíritu autodestructivo originado en su desesperación e ignorancia. Podemos ser sal, podemos ser luz, pero necesitamos estar sanos.
Juan Carlos Flores Zúñiga
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08 septiembre 2017
Ojalá el Wifi en los aviones nunca sea gratis
Aún recuerdo cuando viajar significaba desconectarse. Aislarse por un momento, días o semanas para estar con uno mismo de manera forzada o voluntaria. Hoy en día la obsesión del ser humano por mantenernos conectados convierte esos momentos en casi recuerdos.
Hace poco vi un reportaje del New York Times sobre la tecnología de entretenimiento en los vuelos comerciales. Cada vez más las aerolíneas apuestan por mejorar la experiencia de vuelo. No lo voy a negar, es genial poder ver películas a tu elección en un vuelo a Europa que además puedes pausar, adelantar y cambiar el idioma a tu antojo. Ahora también se puede jugar videojuegos, chatear entre asientos y hasta conectarse a internet.
Es fabuloso que toda esta tecnología pueda ayudarnos a sentir un poco más breve un vuelo de 14 horas. Pero también hay otro lado. No todos viajan por placer y hay una enorme cantidad de pasajeros en los aviones cuya razón son los negocios. Para muchos de ellos, los aviones y su “aislamiento” representan (aban) un preciado momento de desconexión. Durante el vuelo no hay forma de que el jefe te llame, te mande correos o mensajes. Estás en el aire y por ahora la vida se suspende en el trayecto.
Durante el tiempo de vuelo puedes hacer un montón de cosas que nuestra costumbre de pasar nuestra vida con un pantalla enfrente nos ha hecho olvidar. Leer un libro de papel, de papel! Platicar con tu compañero de asiento, meditar, pensar, dormir, relajarte, desconectarte, ver el cielo, el cielo!.
Yo personalmente encuentro en los trayectos de avión momentos extremadamente productivos donde he recuperado la lectura, he compuesto canciones, escrito muchos artículos y filosofado sobre la vida.
Ahora que el internet amenaza con llegar cada vez más fuerte y rápido a las cabinas aéreas, es posible que esto también se pierda. Estaremos conectados día y noche, en cielo y tierra. Ahora podrás recibir un mail a diez mil metros de altura y seguirás trabajando. Tu jefe podrá darte lata mientras te trasladas a alguna ciudad y podrás tener peleas por whats app con tu pareja.
También es verdad que el hecho de poder estar conectados durante un vuelo puede ayudar a la productividad, pero no tengamos miedo a descontarnos!. Cada vez será más difícil buscar lugares o momentos donde de verdad tengamos que desenchufarnos de la “realidad” y conectarnos a nosotros mismos.
No estoy diciendo que estoy en contra de la conectividad, pero ese lado adictivo de la tecnología me asusta pensando en el futuro. Si bien nuestra vida social se ha visto afectada gracias a los teléfonos inteligentes, no quiero pensar que pueda pasar cuando no haya rincón en la tierra (o en el cielo) donde no pueda llegar un mensaje de texto.
Ya escribí un articulo sobre viajar antes de los smartphones. Ojalá no llegue ese día donde estar conectado signifique todo menos estar presente.
Por eso digo que ojalá el WiFi en los aviones no sea gratis, para que por lo menos el precio por desconectarnos de la vida real vaya más allá del personal que de por sí ya es bastante alto y nos haga pensarlo dos veces.
Hace poco vi un reportaje del New York Times sobre la tecnología de entretenimiento en los vuelos comerciales. Cada vez más las aerolíneas apuestan por mejorar la experiencia de vuelo. No lo voy a negar, es genial poder ver películas a tu elección en un vuelo a Europa que además puedes pausar, adelantar y cambiar el idioma a tu antojo. Ahora también se puede jugar videojuegos, chatear entre asientos y hasta conectarse a internet.
Es fabuloso que toda esta tecnología pueda ayudarnos a sentir un poco más breve un vuelo de 14 horas. Pero también hay otro lado. No todos viajan por placer y hay una enorme cantidad de pasajeros en los aviones cuya razón son los negocios. Para muchos de ellos, los aviones y su “aislamiento” representan (aban) un preciado momento de desconexión. Durante el vuelo no hay forma de que el jefe te llame, te mande correos o mensajes. Estás en el aire y por ahora la vida se suspende en el trayecto.
Durante el tiempo de vuelo puedes hacer un montón de cosas que nuestra costumbre de pasar nuestra vida con un pantalla enfrente nos ha hecho olvidar. Leer un libro de papel, de papel! Platicar con tu compañero de asiento, meditar, pensar, dormir, relajarte, desconectarte, ver el cielo, el cielo!.
Yo personalmente encuentro en los trayectos de avión momentos extremadamente productivos donde he recuperado la lectura, he compuesto canciones, escrito muchos artículos y filosofado sobre la vida.
Ahora que el internet amenaza con llegar cada vez más fuerte y rápido a las cabinas aéreas, es posible que esto también se pierda. Estaremos conectados día y noche, en cielo y tierra. Ahora podrás recibir un mail a diez mil metros de altura y seguirás trabajando. Tu jefe podrá darte lata mientras te trasladas a alguna ciudad y podrás tener peleas por whats app con tu pareja.
También es verdad que el hecho de poder estar conectados durante un vuelo puede ayudar a la productividad, pero no tengamos miedo a descontarnos!. Cada vez será más difícil buscar lugares o momentos donde de verdad tengamos que desenchufarnos de la “realidad” y conectarnos a nosotros mismos.
No estoy diciendo que estoy en contra de la conectividad, pero ese lado adictivo de la tecnología me asusta pensando en el futuro. Si bien nuestra vida social se ha visto afectada gracias a los teléfonos inteligentes, no quiero pensar que pueda pasar cuando no haya rincón en la tierra (o en el cielo) donde no pueda llegar un mensaje de texto.
Ya escribí un articulo sobre viajar antes de los smartphones. Ojalá no llegue ese día donde estar conectado signifique todo menos estar presente.
Por eso digo que ojalá el WiFi en los aviones no sea gratis, para que por lo menos el precio por desconectarnos de la vida real vaya más allá del personal que de por sí ya es bastante alto y nos haga pensarlo dos veces.
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06 septiembre 2017
Más Allá del McMindfulness
De repente, la meditación mindfulness se ha convertido en un fenómeno de masas, abriéndose camino hacia escuelas, empresas, prisiones y agencias del gobiernos incluyendo el ejército americano. Millones de personas están recibiendo beneficios tangibles de su práctica de mindfulness: menos estrés, mejor concentración, quizá un poco más de empatía. No es necesario decir que esto es un gran avance que debe ser bienvenido, pero que tiene una sombra.
La revolución del mindfulness parece ofrecer una panacea universal para resolver casi todas las áreas de las preocupaciones diarias. Libros recientes sobre el tema incluyen: Padres mindfulness, Comer (de forma) mindfulness, Política mindfulness, Terapia mindfulness, Liderazgo mindfulness, Una nación mindfulness, Recuperación mindfulness, El poder del aprendizaje mindfulness, El cerebro mindfulness, El camino del mindfulness a través de la depresión, El camino del mindfulness hacia la autocompasión. Casi diariamente, los medios citan estudios científicos que informan los numerosos beneficios para la salud de la meditación mindfulness y cómo una práctica sencilla puede producir cambios neurológicos en el cerebro.
La popularidad creciente del movimiento mindfulness también se ha convertido en una lucrativa industria artesanal. Los consultores promueven la formación en mindfulness prometiendo que mejorará la eficiencia laboral, reducirán el absentismo e incrementarán las habilidades sociales cruciales para el éxito laboral. Algunos incluso afirman que la formación mindfulness pueden actuar como una “tecnología disruptiva”, reformando incluso las compañías más disfuncionales en organizaciones más amables, compasivas y sostenibles. Hasta el momento, no obstante, no se han publicado estudios empíricos que sostengan dichas afirmaciones.
En sus esfuerzos de promoción, los partidarios de la formación mindfulness habitualmente incluyen en el prólogo que sus programas están “inspirados en el budismo“. Hay un cierto caché a la hora de decir a los neófitos que el mindfulness es un legado del budismo, una tradición famosa por su antiguedad y sus métodos de meditación probados. Pero, al mismo tiempo, los consultores a menudo aseguran a sus patrocinadores corporativos que su particular marca de mindfulness ha retirado todos los lazos y afiliaciones con los orígenes budistas.
Desligar el mindfulness de su contexto ético y religioso del budismo es un movimiento comprensible para hacer dicha formación como un producto viable en el mercado. Pero la urgencia para secularizar y acomodar el mindfulness a una técnica de mercado puede llevar a una desafortunada desnaturalización de esta antigua práctica, cuyo objetivo es mucho más que aliviar una jaqueca, reducir la presión sanguínea o ayudar a los directivos a estar más centrados y ser más productivos.
Generar una técnica más simplificada y secularizada (lo que algunos críticos empiezan a llamar “McMindfulness“) puede volverla más apetecible al mundo empresarial, pero esta descontextualización del mindfulness de su propósito original de liberación y transmisión de ética social tiene algo de “negocio fáustico“. En lugar de aplicar mindfulness como una forma de despertar a personas y organizaciones de las malsanas raíces de la avaricia, aversión y la ignorancia, habitualmente se moderniza hacia técnicas banales, terapéuticas y de auto-ayuda que en verdad refuerzan esas raíces.
La mayor parte de las opiniones científicas y populares que circulan por los medios han retratado el mindfulness en términos de reducción de estrés y mejora de la atención. Los beneficios de estas habilidades son una herencia no condicionada del mindfulness y es su mayor atractivo para las empresas actuales. Pero el mindfulness, entendido y practicado dentro de la tradición budista, no es meramente una técnica éticamente neutra para reducir el estrés y aumentar la concentración. En su lugar, el mindfulness es una cualidad distintiva de la atención que depende y se ve influida por muchos otros factores: la naturaleza de nuestros pensamientos, acciones y palabras, nuestra forma de ganarnos la vida y nuestros esfuerzos para evitar comportamientos poco saludables y desarrollar otros comportamientos que propicien acciones sabias, armonía social y compasión.
Los budistas diferencian entre el mindfulness correcto (samma sati) y mindfulness incorrecto (miccha sati). La distinción no es moral; la cuestión es si la calidad de la consciencia se caracteriza por tener las intenciones saludables y cualidades mentales positivas que lleven a la prosperidad y al bienestar a los demás y a uno mismo.
De acuerdo con el Canon Pali (las primeras enseñanzas registradas del Buda), incluso una persona que cometa un crimen premeditado y cruel puede estar practicando mindfulness, el mindfulness incorrecto. Claramente, la atención “mindful” y la concentración de un terrorista, un francotirador o un criminal de guante blanco no es la misma cualidad de mindfulness que el Dalai Lama y otros adeptos del budismo han desarrollado. El Mindfulness Correcto está guiado por intenciones y motivaciones que se basan en la contención, estados mentales correctos y conductas éticas, objetivos que incluyen pero superan la reducción del estrés y el incremento de la concentración.
Otro malentendido común es que la meditación mindfulness es un asunto privado e interno. A menudo se comercializa el mindfulness como un método para la autorrealización personal, como una forma de aplazar los problemas y tribulaciones del sofocante mundo laboral. Dicha orientación individualista y consumista hacia la práctica de mindfulness puede ser efectiva para la autoconservación y el desarrollo personal, pero es esencialmente inútil para mitigar las causas del sufrimiento colectivo y empresarial.
Cuando la práctica del mindfulness se paquetiza de esta forma, la interconexión de los motivos personales se pierde. Hay una disociación entre la transformación personal de cada uno y el tipo de transformación social y organizacional que tiene en cuenta las causas y condiciones del sufrimiento en un entorno más amplio. Esta colonización del mindfulness también tiene un efecto de instrumentalización, reorientando la práctica hacia las necesidades del mercado en lugar de una reflexión crítica de las causas de nuestro sufrimiento colectivo o “dukkha social“.
El Buda enfatizó que sus enseñanzas trataban sobre la comprensión y cesación de dukkha (sufrimiento en el sentido más amplio). Así pues, ¿qué ocurre con el dukkha generado por cómo funcionan las instituciones?
Muchos defensores del mundo empresarial argumentan que el cambio transformador comienza en uno mismo. Si la mente de cada uno pudiera estar más centrada y en paz, entonces la transformación social y empresarial vendría después. El problema con esta formulación es que las tres motivaciones que el budismo señala (avaricia, odio e ignorancia) hoy por hoy no están confinadas a las mentes individuales sino que se han institucionalizado en fuerzas más allá del control personal.
Hasta el momento, el movimiento del mindfulness ha evitado cualquier consideración seria de por qué el estrés es tan generalizado en las modernas instituciones empresariales. En su lugar, las empresas se han subido a la moda del mindfulness porque desplaza, de manera muy conveniente, la carga de la responsabilidad al individuo: el estrés se encuadra dentro de un problema personal y el mindfulness se ofrece como la medicina correcta que ayuda al empleado a trabajar de manera más calmada y eficiente dentro de un entorno tóxico. Envuelto en un aura de cuidado y humanidad, el mindfulness se pone de moda como una válvula de escape, una manera de liberar la tensión, una técnica para afrontar y adaptarse al estrés del mundo laboral.
El resultado es una versión atomizada y altamente privatizada de la práctica de mindfulness, que se ha confinado en lo que Jeremy Carrette y Richard King (en su libro “Vendiendo Espiritualidad; la conquista silenciosa de la religión“) describen como una orientación acomodaticia. La formación en Mindfulness resulta atractiva porque es un método de moda para suavizar el disconfort de los empleados, promoviendo una aceptación tácita del status quo y un instrumento para mantener la atención centrada en los objetivos empresariales.
En muchos aspectos, la formación del mindfulness en las empresas (con su promesa de que empleados más calmados y menos estresados serán más productivos) tiene muchas similitudes con el movimiento, actualmente desacreditado, de las “relaciones humanas” , populares en las décadas de 1950 y 1960. Esos programas de formación fueron criticados por su uso manipulador de las técnicas de asesoramiento como las de “escucha activa”, establecidas como un método de pacificar a los empleados haciéndoles sentir que se oían sus preocupaciones aunque las condiciones laborales permanecían inalteradas. Esos métodos terminaron siendo conocidos como “Cow psychology” porque las vacas (Cow en inglés) dóciles producen más leche.
Bhikkhu Bodhi, un monje budista occidental ha advertido: “Ausentes de critica social aguda, las prácticas budistas pueden ser fácilmente utilizadas para justificar y estabilizar el estatus quo, convirtiéndose en un refuerzo del capitalismo consumista“. Desafortunadamente, un punto de vista del mindfulness más ético y socialmente responsable se percibe hoy como una preocupación secundaria, o como una politización innecesaria del viaje personal de auto-realización.
Uno tiene la esperanza de que el movimiento del mindfulness no siga el camino habitual de la mayoría de modas empresariales – entusiasmo desenfrenado, aceptación sin crítica del status quo y desilusión final. Para convertirse en una fuerza genuina para la transformación positiva personal y social, debe reclamar un marco ético y aspirar a propósitos más nobles que tengan en cuenta el bienestar de todos los seres vivos.
Ron Purser y David Loy
La revolución del mindfulness parece ofrecer una panacea universal para resolver casi todas las áreas de las preocupaciones diarias. Libros recientes sobre el tema incluyen: Padres mindfulness, Comer (de forma) mindfulness, Política mindfulness, Terapia mindfulness, Liderazgo mindfulness, Una nación mindfulness, Recuperación mindfulness, El poder del aprendizaje mindfulness, El cerebro mindfulness, El camino del mindfulness a través de la depresión, El camino del mindfulness hacia la autocompasión. Casi diariamente, los medios citan estudios científicos que informan los numerosos beneficios para la salud de la meditación mindfulness y cómo una práctica sencilla puede producir cambios neurológicos en el cerebro.
La popularidad creciente del movimiento mindfulness también se ha convertido en una lucrativa industria artesanal. Los consultores promueven la formación en mindfulness prometiendo que mejorará la eficiencia laboral, reducirán el absentismo e incrementarán las habilidades sociales cruciales para el éxito laboral. Algunos incluso afirman que la formación mindfulness pueden actuar como una “tecnología disruptiva”, reformando incluso las compañías más disfuncionales en organizaciones más amables, compasivas y sostenibles. Hasta el momento, no obstante, no se han publicado estudios empíricos que sostengan dichas afirmaciones.
En sus esfuerzos de promoción, los partidarios de la formación mindfulness habitualmente incluyen en el prólogo que sus programas están “inspirados en el budismo“. Hay un cierto caché a la hora de decir a los neófitos que el mindfulness es un legado del budismo, una tradición famosa por su antiguedad y sus métodos de meditación probados. Pero, al mismo tiempo, los consultores a menudo aseguran a sus patrocinadores corporativos que su particular marca de mindfulness ha retirado todos los lazos y afiliaciones con los orígenes budistas.
Desligar el mindfulness de su contexto ético y religioso del budismo es un movimiento comprensible para hacer dicha formación como un producto viable en el mercado. Pero la urgencia para secularizar y acomodar el mindfulness a una técnica de mercado puede llevar a una desafortunada desnaturalización de esta antigua práctica, cuyo objetivo es mucho más que aliviar una jaqueca, reducir la presión sanguínea o ayudar a los directivos a estar más centrados y ser más productivos.
Generar una técnica más simplificada y secularizada (lo que algunos críticos empiezan a llamar “McMindfulness“) puede volverla más apetecible al mundo empresarial, pero esta descontextualización del mindfulness de su propósito original de liberación y transmisión de ética social tiene algo de “negocio fáustico“. En lugar de aplicar mindfulness como una forma de despertar a personas y organizaciones de las malsanas raíces de la avaricia, aversión y la ignorancia, habitualmente se moderniza hacia técnicas banales, terapéuticas y de auto-ayuda que en verdad refuerzan esas raíces.
La mayor parte de las opiniones científicas y populares que circulan por los medios han retratado el mindfulness en términos de reducción de estrés y mejora de la atención. Los beneficios de estas habilidades son una herencia no condicionada del mindfulness y es su mayor atractivo para las empresas actuales. Pero el mindfulness, entendido y practicado dentro de la tradición budista, no es meramente una técnica éticamente neutra para reducir el estrés y aumentar la concentración. En su lugar, el mindfulness es una cualidad distintiva de la atención que depende y se ve influida por muchos otros factores: la naturaleza de nuestros pensamientos, acciones y palabras, nuestra forma de ganarnos la vida y nuestros esfuerzos para evitar comportamientos poco saludables y desarrollar otros comportamientos que propicien acciones sabias, armonía social y compasión.
Los budistas diferencian entre el mindfulness correcto (samma sati) y mindfulness incorrecto (miccha sati). La distinción no es moral; la cuestión es si la calidad de la consciencia se caracteriza por tener las intenciones saludables y cualidades mentales positivas que lleven a la prosperidad y al bienestar a los demás y a uno mismo.
De acuerdo con el Canon Pali (las primeras enseñanzas registradas del Buda), incluso una persona que cometa un crimen premeditado y cruel puede estar practicando mindfulness, el mindfulness incorrecto. Claramente, la atención “mindful” y la concentración de un terrorista, un francotirador o un criminal de guante blanco no es la misma cualidad de mindfulness que el Dalai Lama y otros adeptos del budismo han desarrollado. El Mindfulness Correcto está guiado por intenciones y motivaciones que se basan en la contención, estados mentales correctos y conductas éticas, objetivos que incluyen pero superan la reducción del estrés y el incremento de la concentración.
Otro malentendido común es que la meditación mindfulness es un asunto privado e interno. A menudo se comercializa el mindfulness como un método para la autorrealización personal, como una forma de aplazar los problemas y tribulaciones del sofocante mundo laboral. Dicha orientación individualista y consumista hacia la práctica de mindfulness puede ser efectiva para la autoconservación y el desarrollo personal, pero es esencialmente inútil para mitigar las causas del sufrimiento colectivo y empresarial.
Cuando la práctica del mindfulness se paquetiza de esta forma, la interconexión de los motivos personales se pierde. Hay una disociación entre la transformación personal de cada uno y el tipo de transformación social y organizacional que tiene en cuenta las causas y condiciones del sufrimiento en un entorno más amplio. Esta colonización del mindfulness también tiene un efecto de instrumentalización, reorientando la práctica hacia las necesidades del mercado en lugar de una reflexión crítica de las causas de nuestro sufrimiento colectivo o “dukkha social“.
El Buda enfatizó que sus enseñanzas trataban sobre la comprensión y cesación de dukkha (sufrimiento en el sentido más amplio). Así pues, ¿qué ocurre con el dukkha generado por cómo funcionan las instituciones?
Muchos defensores del mundo empresarial argumentan que el cambio transformador comienza en uno mismo. Si la mente de cada uno pudiera estar más centrada y en paz, entonces la transformación social y empresarial vendría después. El problema con esta formulación es que las tres motivaciones que el budismo señala (avaricia, odio e ignorancia) hoy por hoy no están confinadas a las mentes individuales sino que se han institucionalizado en fuerzas más allá del control personal.
Hasta el momento, el movimiento del mindfulness ha evitado cualquier consideración seria de por qué el estrés es tan generalizado en las modernas instituciones empresariales. En su lugar, las empresas se han subido a la moda del mindfulness porque desplaza, de manera muy conveniente, la carga de la responsabilidad al individuo: el estrés se encuadra dentro de un problema personal y el mindfulness se ofrece como la medicina correcta que ayuda al empleado a trabajar de manera más calmada y eficiente dentro de un entorno tóxico. Envuelto en un aura de cuidado y humanidad, el mindfulness se pone de moda como una válvula de escape, una manera de liberar la tensión, una técnica para afrontar y adaptarse al estrés del mundo laboral.
El resultado es una versión atomizada y altamente privatizada de la práctica de mindfulness, que se ha confinado en lo que Jeremy Carrette y Richard King (en su libro “Vendiendo Espiritualidad; la conquista silenciosa de la religión“) describen como una orientación acomodaticia. La formación en Mindfulness resulta atractiva porque es un método de moda para suavizar el disconfort de los empleados, promoviendo una aceptación tácita del status quo y un instrumento para mantener la atención centrada en los objetivos empresariales.
En muchos aspectos, la formación del mindfulness en las empresas (con su promesa de que empleados más calmados y menos estresados serán más productivos) tiene muchas similitudes con el movimiento, actualmente desacreditado, de las “relaciones humanas” , populares en las décadas de 1950 y 1960. Esos programas de formación fueron criticados por su uso manipulador de las técnicas de asesoramiento como las de “escucha activa”, establecidas como un método de pacificar a los empleados haciéndoles sentir que se oían sus preocupaciones aunque las condiciones laborales permanecían inalteradas. Esos métodos terminaron siendo conocidos como “Cow psychology” porque las vacas (Cow en inglés) dóciles producen más leche.
Bhikkhu Bodhi, un monje budista occidental ha advertido: “Ausentes de critica social aguda, las prácticas budistas pueden ser fácilmente utilizadas para justificar y estabilizar el estatus quo, convirtiéndose en un refuerzo del capitalismo consumista“. Desafortunadamente, un punto de vista del mindfulness más ético y socialmente responsable se percibe hoy como una preocupación secundaria, o como una politización innecesaria del viaje personal de auto-realización.
Uno tiene la esperanza de que el movimiento del mindfulness no siga el camino habitual de la mayoría de modas empresariales – entusiasmo desenfrenado, aceptación sin crítica del status quo y desilusión final. Para convertirse en una fuerza genuina para la transformación positiva personal y social, debe reclamar un marco ético y aspirar a propósitos más nobles que tengan en cuenta el bienestar de todos los seres vivos.
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