Su hermano es un sinvergüenza – Le
decía mi Mamá, cada vez que la encontraba –
Tal vez esperando ingenuamente que mi tía pudiera hacer algo, ante el hecho de que mi Papá se hubiera ido de la casa a vivir con la mejor amiga de Mamá.
Tal vez esperando ingenuamente que mi tía pudiera hacer algo, ante el hecho de que mi Papá se hubiera ido de la casa a vivir con la mejor amiga de Mamá.
Sofía, vivía una filosofía de vida, muy
practica, cuando yo tenía un problema y sentía que el mundo se me iba a venir
encima, la buscaba y ella siempre un segundo después de contar mi tragedia, tenía
un comentario habitualmente chistoso, con el que le quitaba todo el drama a mi
historia y me hacia entender, que en la vida podemos sufrir o reír ante el
mismo hecho, ¿por qué sufrir si podemos reír? Decía, todo lo que pensamos que
hoy es tan terrible hasta lo olvidaremos y la vida seguirá.
Mi Mamá dejo de quejarse con Sofía
acerca de Papá cuando un día mi tía, respondió al mismo comentario - Sabe
Leonor, le dijo a mi Mamá – Usted debería estar muy agradecida con esa señora,
debería mandarle una tarjeta de navidad
y de cumpleaños, se imagina el problema que ella le quitó, ahora es ella quien se aguanta las
borracheras, las locuras de mi hermano y usted puede vivir su vida tranquila y hasta
encontrar otra pareja que la trate mejor, las dos soltaron una carcajada y mi
Mamá desde ese momento no solo quedo muy agradecida con Sofía, sino con la señora, que se llevo a mi
Papá. Mi Papá nunca cambio, mi Mamá encontró otra persona
con quien construyó una vida mucho más grata para ella.
Y mi Tía Sofía tubo una vez más razón, -todo,
absolutamente todo lo que pasa en la vida, por doloroso que parezca, nos lleva la posibilidad de mejorar nuestra vida, de
ser más felices.
Lo que nos causa dolor, no es lo que
ocurre sino nuestro apego a esperar que las vida sea como queramos y las
personas actúen como esperamos, la felicidad no está en esperar, sino en vivir
lo que hay, los regalos en buscar en lo que tenemos, en lo que la vida nos
ofrece.
Piensa en aquello por lo que te quejas y
justificas tu dolor y reconoce, lo maravilloso
que ese hecho ha traído a tu vida.
que ese hecho ha traído a tu vida.
Y si puedes reír en vez de llorar es
que verdaderamente habrás encontrado los tesoros.
Recuerda como algo que te ocurrió en tu
vida que en su momento
creías doloroso y muy difícil de
superar, te sirvió para hacerte más libre y feliz.
El sufrimiento no tiene nada que ver
con los hechos, sino con el pensamiento, cambia la manera de contar tu historia
y cambiara en este instante, tu vida.
En realidad lo único que perdemos en la
vida son los apegos, lo demás nunca lo poseemos, poseer es una ilusión, no soy
dueño de mis seres queridos, solo tengo el regalo de disfrutarlos mientras los
tenga.
La comodidad, la seguridad, la riqueza
o la pobreza son solo conceptos, tan relativos que aun para cada persona, en
cada momento de su vida son diferentes.
Si sufro por algo, es solo porque me he
creído la historia que me contaron acerca de que tengo que sufrir, si me pasa
esto o me pasa lo otro y sufriré hasta el mismo instante en que me diga que ya
no vale la pena sufrir por eso.
Un niño que nace con solo un brazo o
una pierna, solo comienza a sufrir cuando le cuentan la historia que es
anormal, que tiene un defecto, que se debería sentir mal.
Dicen que el tiempo lo cura todo, no es
el tiempo, es el decidir cambiar la historia, si digo esto es muy duro, esa es
mi historia. Si me digo que es normal sufrir por esto sufriré, hasta que me diga que es suficiente. Si
me digo, ya he sufrido bastante voy a seguir con mi vida. Mi sufrimiento terminara solo porque he
decidido que es suficiente.
El sufrimiento es una receta segura de
la suma de dos pensamientos el primero esto debería ser así y el segundo si no
es así yo debería sufrir.
El sufrimiento no va a cambiar la
realidad ni para mí, ni para los demás, solo me va a hacer más difícil y
dolorosa la vida.
Para mí, el sufrimiento no es una
prueba de amor, sino de desamor, amor es crear felicidad, sabiendo que la vida
es lo que es, no dolor que me va a hacer más difícil lo difícil
Si realmente puedo y quiero hacer algo
por cambiar la realidad, lo puedo hacer mejor y más efectivamente sin la carga
del sufrimiento, que además muchas veces viene acompañado del resentimiento y
la culpa, que hacen la vida aun todavía más difíciles.
Entonces ¿cuál es tu historia?
Carlos Devis
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