Abrir plenamente tu corazón sin la agotadora
exigencia de ser amado a cambio, amar incondicionalmente sin necesidad
ni expectativa, dar sin la necesidad de recibir, estar siempre receptivo
a los regalos que te da la vida, nunca
culpar a nadie por tus tristezas - ese es el nacimiento de la verdadera
abundancia, es la rendición del ego, la alegría más elevada en el mundo.
Tu verdadero poder no reside en tu capacidad de controlar o
manipular, sino en tu capacidad de amar, en darle la bienvenida a la
vida.
Y hablo desde mi experiencia, porque algún día creí que
los demás tenían la culpa, que mi corazón era demasiado pequeño como
para contener galaxias.
Jeff Foster
No hay comentarios.:
Publicar un comentario