Se sentía de maravilla al saber que era la rosa más bella del jardín. Sin embargo, se daba cuenta de que la gente la veía de lejos. Se dio cuenta que al lado de ella siempre había un sapo grande y oscuro, y que era por eso que nadie se acercaba a verla de cerca.
Indignada ante lo descubierto le ordena al sapo que se fuera de inmediato. El sapo muy obediente dijo:
- Esta bien, si así lo quieres.
Poco tiempo después el sapo pasa por donde estaba la rosa y se sorprendió al ver la rosa totalmente marchita, sin hojas y sin pétalos.
Le dijo entonces:
- Vaya que te ves mal.
- ¿Que te pasa?
La rosa contesta:
- Es que desde que te fuiste las hormigas me han comido día a día.
- No he vuelto a ser igual.
El sapo solo contesta:
- Pues claro, cuando yo estaba aquí me comía a esas hormigas.
- Y por eso siempre eras la más bella del jardín.
Tomado de: contarcuentos.com
Descubrí tu blog... Y lo primero que me llamó la atención es el nombre, pues a través de esta palabra hace ya algún tiempo comenzaron a suceder cosas maravillosas en mi vida. Me quedo en tu casa y la disfruto con amor. Gracias
ResponderBorrarGracias por tu vista al blog, eres bienvenida y espero que lo que aquí encuentres sea de ayuda para ti. Un abrazo!!
ResponderBorrarEdith