De acuerdo a Paul Ekman, “Las sonrisas son mucho más complicadas de lo que la mayoría de la gente se da cuenta. Hay una docena de sonrisas, cada una difiere en apariencia y en el mensaje que conlleva. Hay muchas emociones positivas asociadas con el sonreír: gozo, placer físico y sensorial, satisfacción y diversion, para nombrar solo algunas. La gente también sonríe cuando se sienten tristes. Estas no son las mismas a las sonrisas falsas usadas para convencer a otro de que estamos experimentando sentimientos positivos cuando no es así, comunmente disfrazando la expresión de una emoción negativa. Encontramos que la gente es facilmente engañada por estas sonrisas falsas.”
Dieciocho tipos de sonrisas auténticas
Ekman ha identificado no más de dieciocho tipos de sonrisas auténticas y libres de engaños y ha identificado las expresiones faciales y los músculos particulares de la cara involucrados de manera diferente en esta variedad de sonrisas.
La sonrisa falsa tiene la intención de convencer a otra persona de las emociones positivas que en realidad no siente. Cuando un mentiroso usa una sonrisa falsa como máscara, no puede sentir mucho o son emociones negativas las que siente. Es la única sonrisa que miente. Hay una serie de claves que distinguen a las sonrisas falsas de las sonrisas auténticas que pretenden ser: las sonrisas falsas son más asimétricas que las auténticas. Las sonrisas falsas no se acompañan del movimiento de los músculos alrededor de los ojos. La ausencia del involucramiento de los músculos de las cejas son una sútil pero crucial clave para distinguir entre sonrisas falsas y auténticas cuando estas son amplias.
Matthieu Ricard
Del nuevo libro fotográfico 108 Sonrisas.
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