Un místico sufí dice: "Señor y Dios mío, los ojos descansan, las estrellas brillan, se aquietan los pájaros en sus nidos y los monstruos en las tinieblas, y tú eres el Justo que no cambia, la Equidad que no se desvía, el Imperecedero que no muere. Las puertas de los reyes están cerradas con llave y vigiladas por sus hombres de confianza, pero tus puertas están siempre abiertas para quienes acuden a ti. Mi Señor, cada amante está ahora a solas con su amado y yo estoy a solas contigo."
¡Estar a solas contigo y conmigo! Concentrado conmigo mismo.
Cuando un místico se le preguntó de quien había aprendido a concentrarse en profundidad, contestó: "De un gato que vigilaba la guardia de un ratón."
La Verdad, la Belleza, la Luz... se perciben y se disfrutan en la profundidad silenciosa de la concentración cuando estamos atentos ante ellas como el gato lo está ante la guarida de un ratón.
Cada día debes estar atento a la Presencia de tu Ser que es el Ser Absoluto.
Dario Lostado
(Despertar a la conciencia día a día)
Photo by David Robledo |
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